Por la libertad

¿Por qué tanto tráfico en Guatemala?

Otro tema terrible es que no hay espacios para las paradas de los autobuses e interrumpen un carril causando un cuello de botella.

Ayer hice más de cinco horas desde San Antonio Suchitepéquez a la ciudad.   La distancia:  98 kilómetros.  ¿Por qué tanto tiempo?  En primer lugar, en la carretera existen tramos donde hay un solo carril.  Falta infraestructura.  En segundo lugar, hay un retén de la Comisión Interinstitucional contra el Contrabando y la Defraudación Aduanera (Coincon).  La cola era interminable.  Luego vimos una fila de tráileres estacionados a lo largo de la carretera, comenzando ya en la autopista de Palín a Escuintla hasta la ciudad, por la restricción de horarios para circular en la capital.  Otro tema terrible es que no hay espacios para las paradas de los autobuses e interrumpen un carril, causando un cuello de botella.  Finalmente, en la recta de Amatitlán hubo un atentado y cerraron el paso del sur al norte, mientras el Ministerio Público tomaba evidencias en el lugar.

¿Son efectivos en términos de costo-beneficio los retenes? El ministro de Gobernación debería explicar si se justifican estos retenes.

En la ida, por la mañana, a San Antonio Suchitepéquez también encontramos un retén de la policía que causaba interminables colas de vehículos.  Veo varios problemas en todo lo que me tocó vivir ayer, y lo que le toca vivir a la gente que usa a diario esas carreteras.  Y es que el principal problema para ir de un sitio a otro es el de una infraestructura escasa, deficiente y sin conectividad o vías alternas adecuadas.  Pienso que el gobierno ha metido la pata durante muchos años en el tema de infraestructura.  Alguien me comentó que en Guatemala la velocidad de transportar mercadería en las carreteras del país es la menor de casi todo el mundo.  Menos mal que ya han comenzado las carreteras privadas a descongestionar en parte ciertos tramos, como la VAS, que cada día   utilizan más personas y libera las saturadas carreteras públicas.  Pienso que Guatemala se beneficiará muchísimo si más personas deciden invertir en más carreteras privadas y autopistas.  Sería genial que esta carretera a Amatitlán tuviera alguna autopista privada como alternativa.

Con quienes veníamos en el auto comenzamos a cuestionarnos algunos temas.  ¿Son efectivos en términos de costo-beneficio los retenes?  El ministro de Gobernación debería explicar si se justifican estos retenes.  ¿No hay una forma más efectiva de atrapar a los delincuentes?  Sabiendo que el tráfico es terrible, ¿por qué ellos lo empeoran?  A la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), que maneja en parte la Coincon, ¿cuál es el costo-beneficio de esas estructuras que han colocado y que causan un verdadero caos en el tránsito en las principales carreteras del país (hay uno antes de Tecpán, otros antes de Siquinalá y otro antes del Rancho)?  El trabajo está mal hecho.  Por cierto, la Municipalidad de Guatemala, la de Villa Nueva y Mixco también tienen sus retenes.  La Policía Municipal de Tránsito (PMT) de Guatemala se pone en algunas zonas a revisar papeles y causa  un embotellamiento terrible.   Las de Mixco y Villanueva, abusivamente cobran multas en las carreteras nacionales, multas que, entiendo, son ilegales, pero causan embotellamientos, paran abusivamente a los propietarios de los vehículos y hasta tienes que pagar ahí mismo en caso de tener multas.  Un abuso de poder.   Pienso que los retenes son innecesarios y más bien causan problemas terribles de tránsito.

Desconozco el procedimiento del Ministerio Público para tomar evidencia y sé que tienen que hacerlo, pero tal vez hay alguna forma de hacerlo más rápido.  El problema de nuevo es la falta de vías alternas y conectividad de carreteras.  Hay mucho que se puede hacer, pero hagamos algo que funcione, no que cause más embotellamientos.  Pienso que hay muchas oportunidades para vías alternas privadas.  El gobierno no tendría que invertir en lo nuevo, pero sí arreglar lo que existe.

ESCRITO POR:

Ramón Parellada

Empresario. Catedrático universitario. Director del Centro de Estudios Económico-Sociales (CEES).