¿Confusión o colusión?
Copio la demanda que suscribe el Pueblo Maya: “Fuimos y seguimos siendo los que aportamos a la economía de este Estado y queda demostrado que si paramos nuestras labores se detiene la economía de Guatemala. Nuestra propuesta política consiste en institucionalizar la práctica de la Vida Digna en toda política del Estado.
Por ello impulsamos la participación efectiva de autoridades legítimas y representativas del Pueblo Maya elegidas en procesos Asamblearios. Seguiremos defendiendo nuestras tierras y territorios, y sus bienes naturales, con sabiduría y valentía, frente a las amenazas y atentados que sufrimos por parte de empresas, que actúan con la complicidad de autoridades del Gobierno de Guatemala. Que en una muestra de madurez política y respeto al Estado de Derecho, hemos accionado por las vías legales, para demandar del Estado el respeto de nuestros derechos legítimos reconocidos en la Constitución Política y en los Convenios Internacionales; sin embargo, seguimos acumulando los NO de las instancias judiciales; es decir, la negativa a nuestros derechos.
Por eso hoy en el territorio nacional estamos en las calles, parques y carreteras para reflexionar y reforzar nuestro pacto de unidad en la defensa de la vida y no dejar eso en manos de políticos títeres de la oligarquía nacional que siempre nos perjudicaron y siguen perjudicándonos. Nuestra participación orientada en las próximas elecciones generales aportará un equilibrio de poderes en las entidades existentes y facilitará la transición de forma pacífica y democrática hacia una nueva Constituyente Plurinacional. Sin nuestra participación efectiva, el desarrollo inclusivo, sostenible y orientado hacia el combate de la pobreza no será posible”. Consejo de Pueblos Mayas de Occidente.
La mayoría de las reacciones ante lo que decidieron llamar “el bloqueo” en la capital fueron de molestia, debido a la incomodidad sufrida por la ciudadanía para movilizarse. No faltaron calificativos horribles; algunos —tal vez— justificables si tenemos en cuenta la caricatura que hicieron los medios.
Donde otros ven gente manipulada, haragana y sin propuesta yo veo guatemaltecos dispuestos a hacer algo concreto para presionar a un gobierno que abusa a diestra y siniestra del pueblo al que tiene que servir. Aquí todos nos quejamos del gobierno, por todas las razones correctas, pero parece que nadie hace nada. Allá están los miembros del grupo más discriminado, oprimido y empobrecido, haciendo lo que pueden, de manera pacífica.