URBANISMO Y SOCIEDAD
Especulación: intención de revender la tierra
La ciudad de Guatemala, anteriormente Santiago de los Caballeros, fue destruida por los terremotos de 1773, que obligó a trasladarla al Valle de la Ermita. Está situada dentro de una cadena de ciudades precolombinas en donde se utilizaba a campesinos e indígenas en servicios y construcción de carreteras, con una cultura producto de la influencia española, viviendo en champas y excluidos del desarrollo.
Según el salvadoreño Jorge Santos, “existen otros factores vinculados a la pobreza, los servicios urbanos, como el modelo instaurado por la élite económica que solo permite a sus integrantes tener acceso a privilegios”. Va a ser dentro de la pobreza donde se va a desarrollar la violencia y la extorsión, que incide en el valor de la tierra, afectando el funcionamiento urbano al cerrarse calles y barrios como defensa. El terremoto de 1976 dejó a mucha población en estado de pobreza sin vivienda y fueron ubicadas en una serie de barrios periféricos al “Centro” en barrancos. Sin organización social, estos jóvenes se convirtieron en los años ochenta en grupos agresivos, que emigraron con los salvadoreños y fueron atrapados por las mafias de la droga en California y expulsados.
La Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (Encovi) del Instituto Nacional de Estadística (INE) del 2014, apuntó que un 59.3% de la población vive en condiciones de pobreza y el 23.4% en pobreza extrema, aspectos que a decir de expertos están vinculados con la corrupción, la extorsión, el narcotráfico y las pandillas juveniles llamadas “maras”. Las pandillas en el siglo XXI vuelven a participar en actos de vandalismo. que pasaron a ser una estructura criminal más organizada que se dedica a la extorsión y asesinato. Para el investigador salvadoreño, Héctor Silva Ávalos, “las pandillas en la región están experimentado un proceso de sofisticación y vínculos con integrantes del Ejército y la Policía como parte de esa evolución”. Como los casos del comisario y un coronel de alta relacionados con la Mara Salvatrucha en Guatemala. Con un ministro de Gobernación proveniente del gobierno de Colom, corrupto, por fraude y peculado.
El conflicto se agravará con la política migratoria del presidente Trump, que expulsará a las maras e inmigrantes indocumentados a sus países de origen, lo que incrementará la inseguridad y la violencia. Actualmente suman más de tres millones de emigrados, en que solo 11 mil 773 tienen residencia permanente. Mientras, México envía gendarmes a su frontera sur con Guatemala para controlar la migración. Ante la muerte de Arzú, el presidente se queda sin apoyo y utiliza a los vendedores informales del mercado de La Terminal, amenazándolos con que “de que no hacerlo les cerrarían por un mes el local y les impondrían una multa de Q500”. El procurador de los Derechos Humanos dijo: “Esto hace pensar que la obsesión que tiene el presidente contra la Cicig lo ha hecho perderse en el laberinto de ingobernabilidad”.
Estos factores han afectado el área metropolitana, que sin ordenamiento urbano está creciendo anárquicamente, incidiendo en el valor de la tierra, creando una densificación urbana, con desarrollos verticales y horizontales en los barrancos y un sistema vial anticuado e inadecuado y un tránsito y transporte anarquizantes. Frente a este caos pretenden construir un teleférico, de los que se usan en zonas con grandes diferencias de altura, que estaría en una zona sísmica a poco tiempo de que exista un movimiento terrestre, que tendría efectos peores que el de 1976.