Estas y otras características geológicas, resultado de la completa historia de la región, pueden verse gracias a una “inédita vista de pájaro” confeccionada a partir de los datos recogidos a lo largo de 20 órbitas por la sonda Mars Express de la ESA, que la divulgó hoy.
La formación del cañón -situado en la misma región que el mayor volcán del Sistema Solar, Olympus Mons- podría estar directamente relacionada con la del abultamiento de la vecina región de Tharsis, debido a la acumulación de lava durante los primeros miles de millones de años del planeta rojo, añadió la agencia europea en un comunicado.
En ese tiempo, señaló, “la corteza circundante se fue estirando, resquebrajándose y colapsando”, dando lugar al impresionante sistema de fosas de Valles Marineris.
Sus rocas, paredes y llanuras adyacentes, fruto de sucesivas coladas de lava, dan cuenta de la actividad volcánica registrada, al igual que los “complejos patrones de fallas”, también resultado de las imponentes fuerzas de extensión a las que estuvo sometida la región, destacó.
Según la ESA, el aspecto actual del cañón se debe igualmente a los corrimientos de tierra, “especialmente en las fosas situadas más al norte” , donde hay derrumbes más recientes.
La región fue además remodelada “hace cientos de millones de años” por fuentes corrientes de agua que aumentaron la profundidad del cañón, como permitió descubrir la información mineralógica recogida por las diferentes sondas en órbita en torno al Planeta Rojo, entre ellas Mars Express, explicó.