García Urrea murió el pasado domingo en la madrugada, después de batallar con mucha paciencia y estoicismo con un cáncer que padecía hace algún tiempo.
“Tono —como le llamaban sus amigos— era muy simpático, tenía mucha inspiración, destacó siempre por su creatividad y fina ironía en su crítica. Siempre tenía una sonrisa para todos”, expresó la periodista María Eugenia Gordillo, quien saludaba a García Urrea, cada mes en las sesiones del IPSP.
Polifacético
A la edad de 13 años García escribió su primera obra para un grupo de teatro infantil que él organizó en el templo Santo Domingo.
En 1948 comenzó su carrera periodística, en la que destacó con su columna de crítica teatral Desde mi butaca, que se publicó en Prensa Libre, La Hora, Diario de Centro América, El Gráfico, La Nación y Flash de Hoy.
Escribió cuento y poesía. Destacó en obras de un solo acto, pero también escribió otras más complejas como La historia del himno nacional de Guatemala y la teatralización de Don Quijote de la Mancha y la Pasión de Cristo. De su pluma son también los guiones de las películas Caribeña, Cuando vuelvas a mí y El Cristo Negro, producidas en Guatemala.
Recibió múltiples homenajes, entre ellos, la medalla Hugo Carrillo, del Ministerio de Cultura (2002).
García Urrea siempre se esforzó porque se difundiera el periodismo cultural y por fomentar el teatro en Guatemala. Su dramaturgia es talvez la más representada en el ámbito nacional.
