La producción comprende cinco piezas para flauta sola, dos con piano, una con marimba, una con fagote y una con pista electrónica. En todas ellas se pueden apreciar las cualidades musicales de la maestra Corleto, no sólo en cuanto a su gran capacidad técnica, sino respecto a su discernimiento artístico, que la ha llevado a engendrar este primer disco de música guatemalteca para flauta. Esto no quiere decir que no ha habido esfuerzos de grabación anteriores al disco que es objeto de nuestro comentario. Los ha habido, ciertamente. No obstante, todos se han señalado por no abarcar específicamente la música nacional de nuestro tiempo y, lastimosamente, han alcanzado muy poca relevancia.
Es el caso, pues, de darle vuelo a este hermoso atrevimiento que, con el apoyo de la Universidad Rafael Landívar, Caja Lúdica, la Fundación Paiz y la fundación de quien suscribe el presente artículo, ahora sale a luz. La cita es mañana lunes, a las 19 horas, en el auditorio del Conservatorio Nacional de Música, admisión libre.
presto_non_troppo@yahoo.com