Con ese nuevo establecimiento, la casa que forma parte del grupo de moda BCBGMaxAzria desde 1998, se establece en el centro de Europa y asienta una presencia hasta ahora sobre todo en la costa oeste de Estados Unidos, donde sus icónicos vestidos de bandas elásticas son llevados por celebridades de la música y la gran pantalla.
Artistas, como las británicas Kate Moss, Kate Winslet, Catherine Zeta-Jones o Kiera Knightley, la alemana Diane Kruger o las estadounidenses Sharon Stone, Beyoncé Knowles, Rachel Bilson y Madonna, figuran entre las fieles a esos vestidos que esculpen la figura.
“Es muy importante que la marca Hervé Leger esté representada en lugares importantes en Europa como es Luxemburgo”, señaló Azria, que apuntó también a su clientela internacional europea.
Preguntado por las diferencias a la hora de vestir a la mujer estadounidense y a la europea, el diseñador francés, de 63 años, y origen tunecino, señaló que “la globalización, internet y los nuevos medios de comunicación cada vez las hacen menores”.
“La mujer europea se sitúa en el plano de la sugestión y del refinamiento, mientras que la estadounidense es más conquistadora”, señaló a Efe Azria, que dijo sentirse “un hombre plenamente satisfecho por haber tenido la suerte de vestir a todo tipo de mujeres, desde adolescentes a sus madres y abuelas”.
Sobre las tendencias que propone para esta temporada en Hervé Leger, el diseñador apuntó que “la banda elástica sigue en el centro, pero esta estación la mujer Hervé Leger se rebela y lleva también faldas plisadas con cazadoras de cuero con flecos”.
En la colección de este invierno de la marca, presentada en febrero pasado durante la semana de la moda de Nueva York, Azria dibuja una mujer envuelta en seductoras prendas, con accesorios inspirados en el mundo ecuestre y que resaltan la silueta femenina.
Para el diseñador son piezas que fluctúan entre la seducción y el comedimiento y que subrayan la fuerza femenina a través de un diseño de las tiras inspirado en los arneses ecuestres, y con el colorido del otoño, desde los rojos, marrones y cobres mezclados con beiges y tonos empolvados al negro, que sigue siendo uno de sus tonos dominantes.
Cinturones corsé acentúan cintura y cadera, al igual que otros, tipo polisón superpuestos sobre vestidos o faldas, combinados con chaquetas cortas en cuero con cierto aire rockero y con mangas en piel de pelo largo.
“Esta nueva colección se mantiene fiel a los códigos de la casa con vestidos que se adaptan al cuerpo para sublimar a la mujer”, señaló la firma en un comunicado de prensa con motivo de la apertura del establecimiento en Luxemburgo.
En un mundo más romántico, Azria sitúa a la mujer de su colección BCBG, que define como “más depurada y chic, con vestidos en seda, plisados delicados y combinaciones geométricas. Los colores son bastante oscuros, pero el otoño obliga”.
De su esposa Lubov, con quien diseña las colecciones del grupo, el creador francés dijo que forman “un equipo muy complementario. Yo indico las grandes líneas y mi esposa se ocupa minuciosamente de todos los detalles y del seguimiento de los equipos”.