Se calcula que hay unas 8 mil 238 especies de reptiles en todo el mundo, 248 de las cuales habitan Guatemala, según el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap). Según el Listado de Especies Amenazadas del Conap (2022), hay 125 especies de reptiles en amenaza de extinción. El principal factor del declive poblacional está asociado con la pérdida de hábitat, por la agricultura, degradación del ambiente, introducción de especies exóticas invasoras, cambio climático y malos hábitos de consumo de los humanos.
Por ello, el Día de Concienciación de los Reptiles tiene el objetivo de divulgar las causas de los peligros de su extinción, cómo contrarrestarlas y promover programas que contribuyan a su conservación.
Personas que tienen reptiles como mascotas aprovechan este día para compartir las experiencias enriquecedoras de cuidar en casa una boa, iguana o camaleón, por su singular forma de vida, pues cada uno tiene una personalidad atrayente, además de que no ocupan mucho espacio y sus cuidados no son tan intensos como ocurre con un gato o perro.
En este espacio, Dennys Marroquín, médico veterinario, especializado en Animales Salvajes y Fauna Silvestre y director de Mayavet Expeditions, y José Daniel López, zootecnista, especializado en Especies Exóticas, del Arca de Noé, exponen cuáles son los cuidados idóneos de reptiles, para que tengan una larga vida junto a sus dueños, quienes tienen que tomar en cuenta, antes de adquirir alguno, que son animales que no tienen apego emocional hacia el ser humano, por lo que no deben esperar una retribución afectiva a cambio, pues solo se adaptan a la manipulación constante.
Especies prohibidas
Todas las especies de reptiles nativas del país, especialmente las amenazadas y en peligro de extinción, están prohibidas como mascotas en Guatemala, pues son extraídas de la naturaleza. Es fundamental que la persona verifique que el reptil provenga de un criadero registrado y autorizado por el Consejo Nacional de Áreas Protegidas, pues estos animales son objeto de contrabando ilícito dentro del país y en países vecinos.
Entre las especies prohibidas están las lagartijas del género abronias, el Heloderma charlesbogerti, endémico de Guatemala y en grave peligro de extinción, y serpientes del género Bothriechis. Entre los reptiles que se tiene permitido tener como mascotas están los dragones barbados, gecko leopardo, iguana verde, ciertas tortugas y pitón bola.
Alimentación
Dependerá de cada especie. Por ejemplo, las iguanas verdes son folívoras —se alimentan principalmente de hojas—; los geckos leopardo son insectívoros; el dragón barbado tiene una dieta omnívora —se alimenta tanto de hojas como de insectos—, y la pitón bola es totalmente carnívora, y consume pequeños roedores y ranas. Se desaconseja darle a la iguana verde tubérculos, raíces, tallos y frutas.
Es importante que las pitones coman animales enteros, no en partes, pues su dieta es carnívora integral. Los principales problemas en el cuidado de reptiles se originan por manejo inadecuado y por desconocimiento de la dieta y frecuencia de alimentación, por lo que hay que asesorarse con un médico veterinario especialista en fauna silvestre sobre los requerimientos específicos de cada especie en particular.
Recinto
Debe tener una zona caliente y una, fría, debido a que son animales de sangre exotérmica y necesitan ambas temperaturas para termorregularse. Tienen que tener un sustrato y un espacio para esconderse, según la especie, así como un recipiente con agua en el que puedan bañarse. Deben tener a su disposición agua fresca y limpia todo el tiempo. Retirar las heces, según la frecuencia de deposiciones de la especie, para evitar proliferación de enfermedades infecciosas como salmonella.
Lea también: Lagartija Abronia Anzuetoi es vista después de 50 años en el Volcán de Agua
Se recomienda que el recinto o terrario sea de cristal o de acrílico, con ventilación adecuada, pues el material transparente ayuda a observar que estén en buenas condiciones. Para evitar el contagio de enfermedades zoonóticas al ser humano, como la salmonella, lavarse bien las manos antes y después de manipularlos.
Enfermedades comunes
La afección más común en reptiles es la enfermedad metabólica ósea, causada por falta de exposición solar, calor o calcio. También, pueden contraer salmonella, por higiene inadecuada de su recinto, así como deficiencias de vitaminas y minerales. Pueden padecer estomatitis por dieta inapropiada, y las hembras, retención de huevos, al no tener área adecuada de desove en su terrario, y que requiere de cirugía.
Entre las señales que presenta un reptil enfermo está falta de apetito, deformidad de extremidades, de caparazón o caparazón blando, no defeca, sangre en las heces, diarrea, aletargamiento, fluido ocular o nasal, y no realizar su muda de piel. Llevarlos a chequeo veterinario cada seis meses, para verificar su entorno adecuado y plan de alimentación. Evitar objetos cortantes en su recinto o la convivencia con especies que puedan causarles daño.
Lea también: Conozca la historia de una tortuga gigante que escapó de casa
Otros cuidados
Como la mayoría de reptiles no sintetizan la vitamina D3, es importante que tengan exposición al sol o a lámparas de luz ultravioleta y piedras de calor. Es esencial suplementar su dieta con calcio, dos o tres veces a la semana, enriquecido con vitamina D3. Si el animal no se hidrata bien, atomizarle agua. Nunca colocarlos en la tierra, pues pueden contraer algún parásito.
El reptil diurno debe recibir la exposición solar directa y no a través de ventanas o vidrios. No mezclar especies diferentes en un recinto. Algunos, necesitan ser desparasitados. Aunque hay quienes se sienten atraídos por las características peculiares de los camaleones, deben tomar en cuenta que sus cuidados son complejos, pues son arborícolas e insectívoros. Comen de 10 a 15 insectos diarios. Si no se les brinda las condiciones de vida adecuadas, pueden llegar a morir.
Lea también: Descubren curiosa especie de reptil en Australia