Poseen actitud positiva, la cual les motiva y les permite prepararse apropiadamente en el desarrollo de habilidades y destrezas, mantenerse actualizadas en el conocimiento y el desarrollo tecnológico; pero, sobre todo, fomentan y explotan su creatividad.
La creatividad es “explotar la creación imaginativa en pro de la innovación” e interpretada de manera sencilla, es “aprender a ver lo usual, de manera inusual”. Es generar ideas originales e innovadoras.
Es aprender a ver distintas formas, colores, posiciones, estilos… revolucionarlos, probarlos, modificarlos, volver a hacer pruebas. ¡La creatividad aplicada es innovación!
¿Está preparado para participar?
Uno de los principios sustanciales, para lograrlo, es: “jamás compararse con otra persona”.
- Porque no existen, no han existido, ni existirán dos personas iguales. Todos somos diferentes. Cualquier comparación genera datos aparentes.
- Las creencias, las actitudes, los hábitos, las expectativas son distintas.
- Las necesidades y las expectativas, así como las acciones y reacciones, son diferentes.
Otro aspecto clave en todas las personas talentosas; contrariamente a lo que algunas corrientes divulgan, es aprender a dar prioridad al “ser”, en vez del “tener”.
Lo segundo es perjudicial, porque la búsqueda del tener no tiene límites y les transforma en personas egocéntricas, ambiciosas al protagonismo y al materialismo como sus prioridades; lo cual tiende a crear entornos negativos y de conflicto, que operan en su contra.
Mucho más en el entorno actual de la competitividad colectiva, porque crean barreras para el trabajo en equipo y para la asociatividad que inicia con la familiar, sobre la que descansa la paz.
Por el contrario, quien busca el “ser”, logra la superación personal y profesional, que, en conjunto, le permite preparar un perfil idóneo y competente para responder efectivamente a los diferentes retos que la sociedad le presenta. Y con altas probabilidades de lograr “tener”.
También es la creatividad la que fortalece la habilidad de saber: analizar situaciones, solucionar problemas y tomar decisiones, pero con pleno respeto al derecho y a la sinergia del pensar y el opinar del que todas las personas gozan; aunque esto no compromete a tener que estar de acuerdo con las demás opiniones. Para mejores efectos, se recomienda anclarse en los principios que dieron lugar a la formación de una recta conciencia, y saber distinguir y priorizar aquellos valores, frutos del conocimiento humano, que permiten crecer como personas y compartir tal superación con el prójimo.
Esto evita el riesgo de caer en antivalores, propios de pensamientos fuera del sentido común y la racionalidad, que pudieran atentar contra el bien común y el desarrollo consciente colectivo.
Capacidad
MSc. Ing. y Lic. Cecilio Baeza Gámar. baezaylara.consultores@outlook.es
La creatividad es vital para ser competitivos y desarrollar la capacidad para diseñar nuevos proyectos, productos y organizaciones competitivas.