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Sally Mackereth: “Debemos garantizar un futuro que sea habitable para todas las personas”

La arquitecta inglesa habla sobre la transformación de los espacios para dar nuevas respuestas a la dinámica social en un mundo híbrido postpandemia.  

Sally Mackereth en Guatemala

La arquitecta Sally Mackereth en el Centro Cultural Miguel Ángel Asturias, en el marco de su visita a la cátedra Jorge Montes. (Foto Prensa Libre: Cátedra Jorge Montes)

Este año se llevó a cabo la 14ª edición de la Cátedra Jorge Montes, un evento organizado desde la Facultad de Arquitectura y Diseño de la Universidad del Istmo que anualmente propone conferencias, talleres y visitas con especialistas en arquitectura y urbanismo tanto del país como del extranjero.

Bajo el título Mutaciones, el evento de este año propuso reflexionar la arquitectura como garante de la supervivencia ante el paso del tiempo y la obsolescencia, así como un elemento de transformación y superación de nuevas dinámicas.

Dentro de una alineación con panelistas de cinco países (México, Italia, Estados Unidos, Turquía, Inglaterra y Portugal), destacó  la participación de Sally Mackereth, arquitecta inglesa quien durante los últimos 25 años ha explorado la relación de la arquitectura con el medio ambiente y la vida de las personas.

En esta plática, Mackereth nos acerca a sus impresiones sobre el uso del espacio físico en un mundo postpandemia en el que las relaciones sociales han mutado a una forma híbrida.

¿Cuáles cree que son las urgencias más recurrentes de la arquitectura y la urbanidad en este momento de la historia?

Vivimos en un mundo distópico, post-pandémico de rápido calentamiento global, con una gran crisis energética, escasez de alimentos, guerras, desilusión política, disturbios civiles y una brecha cada vez mayor entre riqueza y pobreza.

Por supuesto que los arquitectos no pueden salvar el mundo, pero como creadores de cambios, debemos garantizar un futuro que sea habitable para todas las personas. La pandemia nos ha enseñado a ser conscientes de los efectos potenciales del diseño, así como de los edificios. Ahora nos queda reconocer la deuda que tenemos con el entorno natural.

¿Considera que estas emergencias estructurales refieren específicamente a lo que sucede en los países del Norte Global?

Diría que se trata de una crisis global pero no hay una solución arquitectónica universal, ya que la arquitectura debe hacerse en relación con cada contexto. Nunca puede concebirse como una “talla única” para adaptarse a cada lugar.

Sally Mackereth en Guatemala
Mackereth se ha desempeñado por más de 25 años en la arquitectura. (Foto Prensa Libre: Cortesía Cátedra Jorge Montes)

¿Qué puede decir sobre las emergencias urbanísticas y arquitectónicas en países subdesarrollados como Guatemala?

Soy consciente de las complejidades de la política aquí, pero simplemente diría que los gobiernos de estos países deben pensar a largo plazo, invirtiendo en una arquitectura considerada y contextual que aborde las necesidades de vivienda, salud, cultura y educación de su gente.

¿Qué relación cree que tiene la arquitectura con la identidad de quienes habitan un territorio?

Es fundamental que la arquitectura refleje los valores y culturas de su gente para que sea una expresión tridimensional de sus esperanzas y sueños colectivos. Los edificios deben ser inclusivos en su diseño, ser fuente de orgullo cívico y generar un sentido de verdadera identidad y pertenencia.

¿Cuál cree que es la importancia de desarrollar proyectos urbanos que respeten los entornos naturales y las personas originarias de las comunidades de esos territorios?

La arquitectura debe ahora más que nunca respetar, preservar la tierra y el orden natural, así como los pueblos indígenas y sus territorios.

¿Cuáles tendencias están impulsando nuevas formas de ver la arquitectura hoy en día?

Hay un creciente sentido de responsabilidad que sienten los arquitectos por cuestionar el modelo doméstico serio y de volver a concebir formas sostenibles de vida tanto en la ciudad como en la tierra. La revolución tecnológica ha traído soluciones inteligentes que están a la altura de los desafíos sociales planteados por la pandemia global para crear un hogar híbrido.

Esto se manifiesta como un entorno flexible con espacios multifuncionales que permiten la ocupación multigeneracional y un hogar que puede transformarse para la adaptación a ese cambio inevitable en la forma en la que trabajamos, descansamos y jugamos ahora.

¿Qué impresión le deja el territorio arquitectónico y urbano en Guatemala?

Vivo en Londres y he tenido la suerte de trabajar en muchas ciudades importantes del mundo, pero tenía curiosidad por visitar Guatemala y vine sin ideas preconcebidas. Aparte de sus locos atascos de tráfico, estoy sorprendida por la arquitectura modernista junto con edificios art-deco y otros más tradicionales del patrimonio hispano. Quedé fascinada con el Palacio Nacional de la Cultura y totalmente asombrada por el Teatro Nacional.

¿Cuál cree que es la importancia de hablar de arquitectura hoy en día?

Es una profesión noble que conlleva una gran responsabilidad, ya que los edificios que diseñamos sobreviven e impactan a las generaciones venideras. El debate arquitectónico es esencial si queremos habitar edificios que puedan inspirar con elegancia mientras se adaptan a nuestras necesidades.

¿Qué recomendaciones les daría a las personas interesadas en aprender más sobre arquitectura? ¿Cómo deberían empezar a involucrarse en información estructural y estética?

Internet es un punto de partida crucial ahora que se pueden consultar sitios web como Pinterest, Wallpaper, Dezeen, Architectigest, o Architecture. Es interesante viajar para la inspiración, pero recomiendo empezar con una exploración de las propias ciudades sin un mapa o un plan.

ESCRITO POR:

Alejandro Ortiz

Periodista de Prensa Libre especializado en temas sobre cultura y bienestar, con 5 años de experiencia.

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