Salud y Familia

Y estos órganos ¿qué utilidad tienen?

Cuando a alguien le extirpan la vesícula o el apéndice, surge la pregunta sobre la función de estos órganos, puesto que muchos pueden vivir sin ellos con normalidad.

Por otro lado, algunas partes de la anatomía humana causan más problemas que beneficios, como las cordales, y otras suelen pasar desapercibidas como huella de la evolución.

“El hecho de que se pueda vivir sin ellas no quiere decir que no sirvan para nada”, explica el médico ortopedista y traumatólogo Carlos René Rayo.

“Nosotros no tenemos nada que nos sobre en el organismo, pero hay partes sin las cuales se puede vivir relativamente bien”, dice el gastroenterólogo Arturo Carranza. “El apéndice y el bazo, por ejemplo, son dos órganos de dudosa funcionalidad”, añade.

Los llamados órganos vestigiales —como los músculos extrínsecos del pabellón auricular, órgano vomeronasal, tubérculo de Darwin o músculo erector del pelo— son aquellos que han perdido su función original a consecuencia de la evolución, por lo que son partes que no sirven para casi nada. El padre de la evolución, Charles Darwin, ya hacía mención a estas peculiares partes del cuerpo en su obra El descenso del hombre (1871).

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ESCRITO POR:

Brenda Martínez

Periodista de Prensa Libre especializada en historia y antropología con 16 años de experiencia. Reconocida con el premio a Mejor Reportaje del Año de Prensa Libre en tres ocasiones.

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