Salud y Familia

Vitaminas y minerales para fortalecer al organismo en tiempo de frío

Una alimentación variada y equilibrada refuerza las defensas del organismo para ganarle la batalla a las enfermedades, en especial durante el clima frío de fin de año.

La buena nutrición es la base de una buena salud.  Todos necesitamos nutrientes que fortalezcan nuestro organismo.

Un artículo publicado en EFE se refiere que todas las estaciones  podemos comer todos los grupos de alimentos. Lo que cambia es la preparación.  Lo cierto es que en esta época se apetecen más platos calientes y más potentes y empezamos a pensar en comer platos de cuchara, calientitos y caldosos.

Los expertos refieren que en muchas ocasiones pensamos que con el frío necesitamos consumir más calorías que en las épocas de calor. Pero, lo cierto es que el metabolismo es el mismo tanto en tiempo de frío como cuando hay calor. Por esto, las calorías que necesita nuestro organismo son muy similares y lo único que ameritaría un cambio es cuando la actividad física se incremente. En estos casos, sí que las necesidades energéticas podrían aumentar y también la necesidad de líquidos.

La enciclopedia Recetas nutritivas de curan, de editorial Océano hace una comparación al invitarnos a imaginar que el cuerpo está compuesto por millones de pequeñísimas “máquinas” y éstas necesitan de cierto tipo de combustibles para funcionar correctamente, “si se les proporciona un combustible inadecuado, no funcionarán con toda su capacidad.  Si el combustible es de mala calidad, es posible que pierdan fuerza.  Y si las máquinas no reciben energía, se detienen”.

Una alimentación variada es esencial para mantener la salud. (Foto Prensa Libre: Roman Odintsoy/Pexels)

Sin duda, el combustible para el cuerpo proviene directamente de lo que comemos.  Los alimentos que consumimos contienen nutrientes.  La nutricionista Karla Gabriela Colindres, comenta que de todos los alimentos tomamos los macronutrientes en forma de carbohidratos, grasas y proteínas, así como los micronutrientes de vitaminas y minerales, cada uno de ellos funciona como protector en ciertos procesos de defensa en el sistema inmunitario.

Otras acciones que se necesitan para una vida saludable son un buen descanso, la práctica de ejercicio y la gestión del estrés, que no son componentes nutricionales, pero que sí ayudan al sistema de defensas, agrega Colindres.

Un poco de ayuda

“A través de la alimentaciones nos aseguramos que podemos obtenerlos”, dice la experta y hace el énfasis en que la idea es que cuando comamos llevemos a nuestro organismo alimentos variados y equilibrados para lograrlo.

“Últimamente tenemos cambios de clima y temperatura que nos exponen a tener resfriados o enfermedades respiratorias”, dice Colindres. Sugiere mantener la dieta equilibrada para lograr aportes importantes al organismo que prevengan estas enfermedades y sugiere tomar suplementación únicamente cuando las personas no se alimentan bien.

Los suplementos vitamínicos que se consiguen sin receta vienen en diversidad de presentaciones.  Algunos se encuentran en forma líquida, en tabletas, cápsulas, polvos, inyectados, entre otros.  Estas deben guardarse en un lugar fresco y oscuro.  Es importante elegirlas con base en lo que uno reamente necesita.

Quienes necesitan más nutrientes de lo normal son las personas activas y que hacen ejercicio, mujeres embarazadas o quienes están sometidos a mucho estrés, están a dieta, enfermas mental o físicamente, o en recuperación de una intervención, por mencionar algunas.

¿Qué comer?

Como las vitaminas y los minerales son tan necesarios para la salud, la U.S. Food and Drug Administration (FDA) recomienda consumir diariamente determinadas cantidades de ellas.  Aquí mencionaremos las principales, pero recuerde que mientras más colores y opciones naturales regale a su cuerpo, en las porciones adecuadas, estará más saludable.

Qué no falte la D

Actualmente una de las vitaminas más importantes es la D, explica Colindres, porque se ha analizado que algunos pacientes con deficiencia de ella tienen riesgo de padecer más enfermedades autoinmunes, cardiovasculares, neurológicas, entre otras.

Esta se encuentra en pescados grasos, hígado de res, queso, huevo, y en alimentos fortificados como leche, cereales y otros. Si se consume como suplemento alimenticio debe ser con asesoría. El cuerpo regula la cantidad de vitamina D que se produce por la exposición al sol, y ni siquiera los alimentos fortificados contienen grandes cantidades de esta vitamina.

La famosa C

Según un análisis de Grupo Encosa, esta vitamina es imprescindible para el desarrollo y crecimiento de los seres humanos.  Ayuda a la reparación de los tejidos en todo el cuerpo, forma colágeno (tejido para cicatrizar), fortalece los huesos y dientes.  También se asocia con la prevención de resfriados.

Investigaciones aseguran que los refriados de las personas que consumen vitamina C con regularidad podrían durar menos tiempo o tener síntomas menos severos.  Está en la naranja, toronja, mandarina, kiwi, papaya, piña, sandía y otras.

Sobre la vitamina B

Este grupo se divide en distintos componentes que ayudan desde la formación de glóbulos rojos hasta participar en el desarrollo cerebral de los niños durante el embarazo y la infancia. Los alimentos que la contienen son los huevos, yogur, leche, carne, pescado, cereal y pan integral, por mencionar algunos.

Vitamina A

Es considerada una barrera naturales contra las infecciones.  Necesaria para  la formación y al mantenimiento de dientes, tejidos blandos y óseos, membranas mucosas y piel. Está en el hígado, mantequilla, huevo y lácteos enteros, vegetales verdes o de coloración roja-anaranjada y algunas frutas como melón y melocotón.

El zinc

Este cuenta con cerca de 200 funciones beneficiosas para el cuerpo humano y el fortalecimiento del sistema  inmune.  Se encuentra en los pescados, yemas de huevos, mariscos, legumbres, nueces, soyas y cereales integrales.

Hierro

El déficit de hierro es relativamente frecuente y afecta principalmente a mujeres jóvenes y embarazadas. Consúmalo en hígado, carnes, pescado, huevos y lácteos.

Para conocer más detalles revise el documento creado por la Asociación de Nutricionistas de Guatemala (Andeguat) llamado Alimentación en época de Covid-19

Programe una dieta sana

Compartimos unas pautas para que su dieta sea rica en nutrientes y sume positivamente a su salud:

  1. Evite alimentos que contengan aditivos o ingredientes artificiales.  Los aditivos aumentan poco o nada el valor nutricional de cualquier alimento y algunos en exceso podrían representar una amenaza para la salud.  Así que lo mejor es comer lo más natural posible.
  2. Prefiera los alimentos crudos.  En sus compras incluya siempre frutas y vegetales.  Muchas de las frutas y vegetales convendría consumirlos íntegramente y en opciones como la manzana incluso con su cáscara, rica en nutrientes.  Prepare ensaladas y otras recetas en que los disfrute.
  3. Evite sobrecocinar los alimentos porque esto destruye parte de los valiosos nutrientes.  Evite dejarlos dorados o quemados.
  4. Limite su consumo de sal.  El ideal es consumir menos de 500 miligramos diarios, es lo necesario para que el sodio cumpla las funciones vitales que le corresponden al organismo.

ESCRITO POR:

Ingrid Reyes

Periodista de Prensa Libre especializada en periodismo de bienestar y cultura, con 18 años de experiencia. Premio Periodista Cultural 2023 por el Seminario de Cultura Mexicana y premio ESET región centroamericana al Periodismo en Seguridad Informática 2021.