Este es el caso de miinfo, una aplicación gratuita recién lanzada al mercado, diseñada para proveer información con base en la geolocalización del usuario —personalización—, sobre ofertas y reportes del tránsito en la capital.

Los jóvenes guatemaltecos Juan Sebastián Rohrmann y Álvaro Urrejola, gerente general y director técnico de la empresa Miinfo, S.A., respectivamente, son los ideadores de esa app.

Rohrmann explica que el miinfo ofrece sin costo rutas alternas en tiempo real, con base en el monitoreo y análisis de información recabada por sus 22 cámaras ubicadas en 57 rutas, y sugiere ofertas de 30 establecimientos asociados en puntos cercanos de donde se encuentre el usuario.

publicidad 2.0

El modelo de negocio de miinfo, según Urrejola, se basa en aprovechar la plataforma para brindar solución a uno de los mayores problemas de los capitalinos, el tránsito, para estimular el consumo, mediante la publicidad de ofertas.

Rohrmann agrega que la aplicación introduce el concepto de publicidad 2.0 —participativo— al permitir que los usuarios de miinfo puedan interactuar con el anuncio e integra la posibilidad de compartirlo a su círculo social, recomendarlo y ganar valor al momento de genera un mayor tráfico del mismo.

Carlos Paredes, director ejecutivo del Campus Sur de la Universidad del Valle de Guatemala, considera que los desarrollos tecnológicos como miinfo, cuya descarga es gratuita, basa su negocio en la publicidad más que en la venta por micropago de la aplicación misma.

“El negocio en este caso realmente no es vender la aplicación, sino la publicidad dentro de esta, que puede presentarse ya sea como banners que pagan una cuota fija por espacio o que ganan valor por clic”, refirió Paredes.

Mercado incipiente

Como miinfo, cada día salen al mercado guatemalteco nuevas aplicaciones de servicio e información con modelos de negocios subyacentes y, en algunos casos, sin interés comercial como la aplicación social Espantacacos.

“El mercado es grande, y en este, el emprendimiento tiene que lograr encontrar la necesidad que puede ser satisfecha por una app y luego volverla negocio”, reitera Paredes.