Escenario

Fallece la diva libanesa Sabah a los 87 años

La cantante y actriz libanesa Sabah, considerada un icono en el mundo árabe, falleció el miércoles a los 87 años, anunció la agencia libanesa Ani.

BEIRUT –  Sabah, cuyo verdadero nombre era Jeanette Gergi Feghal, falleció al alba en la cama del hotel en el que se encontraba, en las afueras de Beirut, anunció su representante, Joseph Gharib.

Su funeral tendrá lugar el domingo en el centro de la capital libanesa.

Nació en 1927 en la pequeña aldea libanesa de Bdadun y empezó a cantar en 1940, marcando el inicio de una carrera en la que publicó unos 50 álbumes y más de 3 mil canciones.

La cantante, que publicó unos cincuenta álbumes y participó en un centenar de películas, desarrolló la mayor parte de su carrera artística en Egipto. (Foto Prensa Libre: AP)

Interpretaba, sobre todo, canciones tradicionales libanesas, producidas en su mayoría por los hermanos Rahabani o los compositores egipcios Baligh Hamdi y Mohamed Abdelwahab.

Actuó en las salas de conciertos más prestigiosas del mundo, como el Olympia de París o el Albert Hall de Londres.

También triunfó en el cine, esencialmente en Egipto, donde actuó en casi un centenar de filmes.

Sabah era famosa además en el mundo árabe por haber presentado conciertos y participado en programas de televisión. Su agitada vida sentimental -se casó en varias ocasiones- dio mucho que hablar a la prensa del corazón.

Reconocida por su voz cálida y expresiva, este icono de la música folclórica también tenía las nacionalidades jordana, egipcia y estadounidense.

Sabah fue una de las primeras cantantes árabes que actuó en el teatro Olympia de París, en el Piccadilly de Londres y en el Carnegie Hall de Nueva York. (Foto Prensa Libre: EFE)

La artista que quiere seguir en la cumbre jamás descansa, declaró al diario libanés LOrient-Le Jour en 2001. He sido valiente toda mi vida. Lo he decidido todo por mí misma y he hecho lo que yo quería. Solo se vive una vez, añadió.

Hoy tenemos una triste noticia, el icono de la canción Sabah murió y, con su desaparición, se cerró un bello capítulo de la historia de Líbano, lamentó el jefe de la minoría religiosa drusa, Walid Jumblatt, en Twitter.

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