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Tecpán conserva vestigios de la primera ciudad

En sus calles hay edificaciones que guardan mucha historia, pero a la vez una gran actividad económica.

Iglesia y kiosko en el Parque Central de Tecpán. (Foto: Hemeroteca PL)

Iglesia y kiosko en el Parque Central de Tecpán. (Foto: Hemeroteca PL)

Al llegar a Tecpán Guatemala, Chimaltenango, y observar la gran cantidad de comercios —tiendas, farmacias, panaderías, restaurantes, negocios de electrodomésticos y vestuario, se hace difícil creer que entre carteles y edificaciones modernos se encuentren construcciones antiguas, vestigios de lo que fue la primera capital de Guatemala.

Tecpán es un lugar con mucha historia, gran tradición cultural y riqueza natural, en donde el turista puede mezclarse en sus calles con dos culturas: kaqchikel y ladinos, que aprendieron a vivir y formar una ciudad que conjuga pasado y presente.

El edificio de la municipalidad, por ejemplo, es una obra con características españolas, su jardín tiene una fuente de piedra en forma de estrella, rodeada de corredores. En las afueras, en su extenso pasillo se reúnen los vecinos a charlar, algunos se deleitan con un helado, que es comerciado aún en carretilla de madera.

Una gran plaqueta en el corredor principal del inmueble edil hace saber al visitante en donde está: “Tecpán Guatemala la primera capital del reino donde se da inicio la historia de Guatemala”. Fundada el 25 de julio de 1524 por Pedro de Alvarado, quien hizo los nombramientos para integrar el Cabildo.

En este lugar se encontraba Iximché, ciudad de los kaqchikeles, al ser dominada por los españoles la eligieron como su centro de actividades, y asentaron sus poblaciones. Esta parte de la historia es recordada por los vecinos, quienes invitan al visitante a conocerla.

A pocos metros del ayuntamiento está otra construcción que remonta al viajero a la época colonial, la Catedral de San Francisco de Asís. Como escribió Francisco Antonio de Fuentes y Guzmán en su Recordación Florida “Este templo de San Francisco de Tecpán Goathemala es una de las más estimables preseas que tiene el dilatado espacio de esta América”. Según dicho autor, el edificador de la obra fue Agustín de Salablanca.

Al entrar, sus columnas salomónicas dan la bienvenida. A lo largo del templo retablos dorados, unos con imágenes y otros vacíos, porque el tiempo ha dejado huella en ellos; necesitan reparación, pero aún así no han perdido su belleza. Éstos fueron elaborados y tallados en fina madera y con gran precisión.

En este lugar, además de la historia, el visitante también puede encontrar varios restaurantes, los más conocidos son los ubicados a la orilla de la carretera, famosos por la gastronomía que ofrecen. Centros recreativos con piscina, cafés Internet y la Galería de arte indígena Tz’utujil, con obras de pintores de la región. Si desea ir más allá de la ciudad es imposible no pensar en el Parque arqueológico Iximché, en donde también hay un museo y ventas de artesanías.

En los alrededores se observan planicies de cultivos que le dan diferentes tonalidades de verdes al paisaje; sus pobladores se dedican a la agricultura.

Entre las tradiciones de los pobladores de Tecpán Guatemala están la celebración por la siembra y la cosecha, sin faltar las festividades religiosas. El día de mercado —domingo, jueves y viernes— es una gran actividad comercial, en donde se reúnen muchos de los habitantes de los alrededores.

Tecpán Gutatemala es un destino que ofrece al turista diversos atractivos a pocos kilómetros de la ciudad.

Algo más

  • Se dice que en este lugar abundaba el árbol Iximche, conocido en la actualidad como árbol Ramón, en castellano, y que por eso la ciudad llevó ese nombre.
  • Al conocer los impresionantes palacios y fortalezas, los tlaxcaltecas la llamaron Tecpán Quauhtemallan, que en su idioma significaba residencia real con fortaleza de maderos. Al llegar los españoles y dominarla se les hizo difícil pronunciar el nombre, por lo que la llamaron Tecpán Guatemala.
  • Ubicada en el kilómetro 89 de la carretera Interamericana. Se encuentra a unos dos mil 200 metros sobre el nivel del mar. Su clima es de templado a frío.
  • Día festivo: 4 de octubre (feria titular en honor a San Francisco de Asís).
  • Idioma kaqchikel.

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