Después de que ocurriera un accidente acuático, el 26 de abril último, en el que murió ahogada una estudiante, autoridades y lancheros de Flores, Petén, gestionan la instalación de un apostadero naval en el lago Petén Itzá, para regular el tránsito lacustre.
Abel Santos Jacinto, gobernador de Petén, explicó que se iniciaron las gestiones para que a corto plazo se pueda contar con la patrulla militar, la cual ayudaría en la regulación y control de embarcaciones. “El objetivo es que incida en la seguridad del lanchero y de los pasajeros, y de esa manera evitar accidentes”, dijo Santos.
Francisco Constanza, presidente de la Asociación de lancheros, comentó que desde hace varios años han solicitado un apostadero fijo, ya que es importante la supervisión permanente. “No hay que esperar a que ocurran más accidentes lamentables”, afirmó Constanza.
Carlos Castillo, comandante de la Primera Brigada Militar, en Santa Elena, Flores, explicó que se mantiene comunicación con el viceministerio de la Defensa Marítima, para agilizar gestiones y ubicar una patrulla en el lago.
