El joven australiano, de 25 años, realizó el recorrido a una media récord en la historia del Tour de 55,446 km/h.
Dennis había elegido lanzarse en la primera hora de carrera, mientras que sus rivales directos salieron en la última hora, por lo que tuvieron que enfrentarse a un viento más constante, pese a la protección de una multitud considerable a lo largo de todo el recorrido.
De los cuatro favoritos a la victoria final, el último vencedor del Tour, el italiano Vincenzo Nibali (22º de la etapa), realizó el mejor tiempo, a 43 segundos del vencedor.
El siciliano sacó 7 segundos al británico Chris Froome, 15 al español Alberto Contador y 18 al colombiano Nairo Quintana, que concedió poco tiempo a sus rivales, en una disciplina que está muy lejos de ser su especialidad.
“No había corrido una contrarreloj desde hace tiempo”, declaró Quintana, satisfecho de sus buenas sensaciones.
Froome fue 39 en la etapa a 50 segundos del vencedor, Contador terminó en el puesto 46 a 58 segundos y Quintaba en el 57 a 1 minuto y 1 segundo, siendo esas mismas posiciones las que tienen en la general.
El domingo, la segunda etapa llega a Zelanda, en Holanda, a orillas del mar del Norte, tras 166 kilómetros.
Aunque Nibali puede estar satisfecho de su primera etapa, fue superado por la esperanza francesa para este Tour, Thibaut Pinot, tercero el año pasado, que sacó 2 segundos al italiano.
Antes de ser felicitado por el rey de Holanda, que estuvo en la salida del Tour, Dennis estuvo esperando mucho tiempo en la zona protocolaria, viendo como todos sus rivales quedaban detrás de su registro.
Una media récord
“No me esperaba ir tan rápido. Tenía en mente a lo largo del recorrido los 16 minutos, que era el tiempo que me había fijado en el entrenamiento. Y en la llegada he hecho un minuto menos”, se felicitó el australiano, medallista de plata en los Juegos Olímpicos de Londres con el cuarteto de persecución de su país.
Dennis rodó más rápido que el estadounidense Greg LeMond, que poseía la media récord en una contrarreloj larga (54,545 km/h sobre 24,5 km) en el Tour de 1989.
El australiano mejoró también la media récord de una etapa prólogo de contrarreloj, de distancia menor, del británico Chris Boardman, que había rodado los 7,2 kilómetros del prólogo de Lille en 1994 a 55,152 km/h.
Dennis (1,82 m y 71 kg) tuvo el récord de la hora durante casi tres meses esta temporada, de febrero a principios de mayo, con una marca de 52,491 km.
Vencedor del Tour Down Under en enero pasado en su país, el rodador australiano participa por segunda vez en el Tour de Francia, tras abandonar en 2013.
“Vino al Tour para esta crono”, explicó su director deportivo del equipo BMC, Yvon Ledanois. “Pero a partir del domingo, trabajará para el estadounidense Tejay Van Garderen, el líder del equipo”, añadió.
El domingo, la segunda etapa llega a Zelanda, en Holanda, a orillas del mar del Norte, tras 166 kilómetros.
Aunque es una etapa rigurosamente llana, el recorrido está expuesto al viento, sobre todo en sus 50 últimos kilómetros hasta Neeltje Jans, la pequeña isla artificial situada en el cordón litoral en la desembocadura del Escaut.
“Los riesgos de cortes en el pelotón son elevados”, previno el director del Tour, Christian Prudhomme, respecto a esta etapa cuyo esprint intermedio, sin bonificación en cuanto a tiempo, estará en el Km 80,5, en Róterdam.
La salida de Utrecht está prevista a las 13:15 locales y la llegada a Zelanda hacia las 17:26 locales (previsión de 46 km/h de media).
