El primero en llegar -8 de la mañana- fue Hebert, el menor de los Brol, el tirador manifestó sentirse feliz y decidido a dejar la piel en el evento para poner en alto el nombre de Guatemala en alto.

“Traemos una preparación bastante extensa, disparamos y salimos mucho. Estamos tranquilos y preparados para cuando se llegue la hora”, indicó el deportista.

Medio hora más tarde apareció Enrique –el mayor- quien irradiaba una sonrisa por su primera aventura en unos juegos de esa magnitud.

“Siento nervios y ganas de llegar ya. Uno se queda pensando en la familia pero todo es por un propósito de poner el nombre de Guatemala en alto”, comentó.

Los atletas guatemalteco viajan con anticipación porque tendrán una preparación previa al inicio del evento. Los hermanos tendrán la oportunidad de tirar dos días en cada una de las tres canchas en las que se disputará el evento de Doble Foso Masculino.

Enrique y Hebert consiguieron su boleto a Río 2016 el año pasado, el primero en el Mundial de Chipe y el segundo en los Panamericanos de Toronto 2015.