Orantes explicó que en la plantación, de aproximadamente media caballería de extensión, además del jocote de corona, hay sembradas otras variedades como jocote migueleño, de pascua y jobito.

“Para nosotros es preocupante porque cada año es menor la producción y la crisis llegaría para las personas que en esta época cortan el jocote y lo venden en el mercado local y en de La Terminal”, dijo Orantes.

Cambio climático

Pedro López, delegado del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación, indicó que el problema en Casillas tiene su origen en el cambio climático.

López explicó que los cambios de temperatura provocan el afloramiento de los árboles de jocote antes del tiempo y esto no favorece al crecimiento del fruto.

Según el experto, lo que ha provocado que la producción del jocote esté bajando es consecuencia no solo de la salida prematura de las flores sino también “del agusanamiento” que se produce en épocas cuando las aves, enemigas naturales de esos insectos, no están en completa reproducción.

López agregó que la enfermedad provoca que el tamaño del fruto disminuya, se reproducen gusanos por dentro, se acelera la madurez de la planta y en el árbol se puede observar las hojas de un color amarilloso decolorado, además que la floración es abundante.

“Eso nos preocupa porque sabemos que la cosecha no será buena porque el jocote no crece y se queda marchito, mientras que otras frutas se llenan de gusanos”.

Luis Godínez, experto en cosecha de frutales indicó que las regiones de clima cálido entre los 27 y 37 grados centígrados, el jocote de corona es reconocido por su excelente tamaño, sabor y color.

Godínez agregó que la época de septiembre y noviembre, cuando llega la cosecha, muchas personas lo venden en los mercados de todo el país.