Este incremento significaría un alza de Q100 con respecto al pago mínimo actual que se encuentra en Q90.16 y para la maquila en Q82.46.
Sin embargo, el sector empleador propuso utilizar la fórmula planteada en su momento por el Programa Nacional de Competitividad (Pronacom) que incluye indicadores como el crecimiento de la economía y el nivel de inflación para establecer un porcentaje de aumento en los salarios mínimos.
El año pasado la decisión de aumentar 3.75% los salarios fue tomada por el mandatario, luego que la CNS no alcanzará un acuerdo.
Pero, según Luis Linares, exministro de Trabajo y Previsión Social y analista económico de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asies), la propuesta de utilizar la fórmula fue un avance, pero lo más adecuado sería hacer mediciones de la productividad y poder incluir ese tema en las discusiones debido a la baja que se ha tenido en el último año.
“La pobreza afecta a la mayoría de la población y uno de los medios es mejorar el ingreso de la población trabajadora, esta decisión del gobierno es totalmente injustificada y socialmente dañina”, agregó Linares.
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Rigoberto Dueñas, miembro de la CNS rechazó la decisión del presidente Morales de mantener el salario mínimo del 2018 para el 2019, una postura, según el dirigente sindical, favorable al sector empresarial.
“Lo comprendemos como producto de una “luna de miel” que existe entre el organismo ejecutivo y el sector empresarial organizado”, expresó Dueñas.
Según el dirigente sindical el mandatario está oblicado a emitir un salario mínimo para el próximo año, y citó el Artículo 113 del Código de Trabajo y el Acuerdo Gubernativo 776-94.
Los cinco efectos positivos y negativos de la decisión de mantener el salario mínimo vigente son:
- Acciones legales: El 3 de enero la gremial sindical convocó a reunión para analizar las acciones a seguir y no descartan plantear una acción legal de amparo czontra el Acuerdo Gubernativo 242-2018, manifestó Rigoberto Dueñas, dirigente sindical.
- Estancamiento del salario real: en el año 2015 según un estudio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre los salarios en el mundo, el país tuvo una reducción del salario real en un 2.2%. Esta es una de las razones por las que el salario mínimo debería incrementarse con relación con una tasa similar a la inflación esperada para el próximo año, dijo Luis Linares de Asies.
- Baja cobertura: La cobertura está por debajo del 20% de la población. No es una herramienta a través de la cual se pueda orientar y mejorar las condiciones de vida de los trabajadores, opinó David Casasola analista económico del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN).
- Conservar empleos: Mantener los empleos actuales, ante un proceso de estancamiento en la economía guatemalteca, afirmó Gabriel Aguilera, ministro de Trabajo y Previsión Social.
- Reducir informalidad: Incentivo para reducir la informalidad, se generan oportunidades de empleo formal como una vía para salir de la pobreza, afirmó Javier Zepeda, director ejecutivo de la Cámara de Industria de Guatemala (CIG).
¿Replantear discusión del salario mínimo?
Ante la falta de consenso surge el planteamiento de buscar otros mecanismos para negociar el salario mínimo, dado que el país carece de una política relacionada a salarios, sugirió Casasola del CIEN.
Según el analista el ritmo de crecimiento del salario mínimo no es el mismo con el que crece la cobertura. “Esos elementos deben analizarse, por lo tanto, se debe generar una política que persiga más allá que una propuesta entre sector privado, sindical, y que al final el presidente debe tomar una decisión”.
Para el analista no existe una certeza o norte técnico, porque es una variable de referencia que debe balancear la capacidad de consumo para los trabajadores pero también balancear la capacidad de pago de las empresas, pero al final lo que se tiene es un mercado informal grande, donde el 75% de la población ocupada está fuera de ese esquema.
“Es ahí donde hay que repensar qué tipo de instrumentos se pueden tener para que al final del día se creen esas condiciones, y no termine en una decisión del presidente y usualmente encontrará posiciones dependiendo qué sector analice las posiciones”, enfatizó Casasola.
Para Zepeda, director ejecutivo de la Cámara de Industria, no se puede pensar de la misma manera, y obtener los mismos resultados, sino que se necesita más creatividad en la discusión y crear condiciones de certeza jurídica para atraer inversiones y generar más empleo y salir del círculo vicioso del salario mínimo, dijo.
Por lo anterior, Gabriel Aguilera, ministro de Trabajo aseguró que proyectan discutir con el sector empleador y trabajador una Política Nacional del Salario, para mejorar la competitividad del país.
“Estamos trabajando en una Política Nacional del Salario de forma tripartita, lo que se busca es establecer un mecanismo que funcione para la fijación de un salario mínimo y esperamos concluirla en el primer trimestre del 2019”, explicó el funcionario.
El funcionario coincidió en la necesidad de actualizar y modernizar la metodología y normativa con el objetivo que oriente a acuerdos entre los sectores.
En ese sentido, la Comisión Nacional de Relaciones Laborales y Libertad Sindical del Ministerio de Trabajo se encuentra trabajando en un documento base para poder plantear la Política Nacional del Salario a la CNS en el primer semestre del próximo año, y que quede institucionalizada, dijo Aguilera.
“Nuestro salario mínimo ya es uno de los más altos a nivel de Latinoamérica, y estamos buscando que exista una verdadera política nacional de salarios, que va más allá de la simple fijación de un salario mínimo”, destacó el funcionario.
Reacciones a favor
El sector empresarial organizado manifestó la complacencia de la decisión de Morales a través de comunicados de prensa que fueron compartidos en redes sociales.
Por ejemplo, la Cámara del Agro de Guatemala calificó de “acertada” la medida con los objetivos de reducir la informalidad y proteger los empleos actuales.
Nils Leporowski, presidente de la Camagro dijo que por primera vez en 20 años el salario mínimo fue fijado de manera técnica acorde a la situación económica que vive el país.
Además, resaltó que el salario mínimo no es la única variable para facilitar la creación de empleos, por lo tanto, hizo un llamado al Gobierno actual y a todos los partidos políticos que participarán en las próximas elecciones para que de manera responsable y con bases técnicas se concreten acciones que propicien el crecimiento económico, la mejora de la productividad y la atracción de inversiones.
Por su parte, la Asociación de Azucareros de Guatemala (Asazgua) afirmó que la decisión permitirá proteger los empleos actuales que otorgan en beneficio de miles de familias guatemaltecas.
Los miembros de Asazgua reiteraron al igual que las otras cámaras que la medida permitirá reducir la informalidad en todo el país y consideraron importante que se vele por el cumplimiento del pago del salario mínimo en todas las actividades económicas del país.
También, el Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (Cacif) dijo que la disposición permite abrir un diálogo más serio y profundo sobre el mecanismo de fijación del salario mínimo.
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