Expertos en prevención y seguridad recomiendan que tomen en cuenta que las instalaciones cumplan con los requerimientos mínimos de seguridad en caso de un siniestro.

La preocupación de los cuerpos de bomberos Voluntarios y Municipales, así como de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres, Conred, surge debido a los accidentes ocurridos.

Recordaron la tragedia que provocó el incendio en el restaurante Punta del Este, zona 9, en octubre del 2001.

El siniestro dejó dos personas muertas y 30 heridos con quemaduras graves, debido a que el local no contaba con medidas de contingencia.

Medidas

Para prevenir una situación similar, Johan Ordóñez, vocero de los Bomberos Voluntarios, señala que antes de acudir a un restaurante o discoteca, deben cerciorarse de que el local tenga como mínimo dos salidas de emergencia y extintores a la vista.

En el caso de los bailadores, sugiere alejarse de equipos de sonido, pues un mal contacto provocaría un cortocircuito.

Los propietarios de los negocios deben capacitar a su personal, para saber que hacer al momento de un siniestro, señala Eber García, de la Conred. Además, recomienda que las instalaciones de gas estén en el exterior de las cocinas.

De acuerdo con una investigación de los Bomberos Municipales, unos 15 mil establecimientos no tienen requerimientos mínimos de seguridad.

Los negocios no tienen extintores ni sistemas para detectar y sofocar fuego, así como sistemas de iluminación y señalización en rutas de evacuación.

Visita

Al realizar una visita a varios restaurantes de la zona 9, se comprobó que algunos no cuentan con las condiciones mínimas de prevención.

En el restaurante Sizzler se verificó que no hay puertas de emergencia ni extintores a la vista. Varios empleados indicaron que no han recibido capacitación en casos de emergencia.

Para conocer si el establecimiento contaba con algún plan preventivo, se habló con uno de los encargados, pero se negó a dar información.

En el restaurante Nais, aunque se observó que sí tienen dos salidas de emergencia, no hay extintores a la vista.

Sin embargo, el gerente Luis Fernando Díaz considera que difícilmente un incendio se origine en el área de clientes.

Por tal razón, asegura que esos aparatos se encuentran en la cocina y lugares donde hay objetos inflamables.

Además, los empleados reciben capacitación constante, entre otras medidas que contempla el plan preventivo.

Cambio de actitud

La tragedia en Punta del Este sirvió de lección a los dueños del restaurante Los Charrúas, el cual se encuentra ubicado en el mismo lugar del anterior.

Ahora tiene cuatro salidas, seis extintores en lugares visibles y los cilindros de gas están fuera del área de cocina.

En el caso de las discotecas, la mayoría no son seguras. Carlos Bárcenas, quien las frecuenta, relata que no tiene puertas de emergencia y no se visualiza ningún extintor.

Dice que semanas atrás se originó una balacera en uno de estos lugares, y hubo caos, pues la gente no tenía por dónde salir.

Pese a que algunos negocios cumplen con los requerimiento básicos de seguridad, la mayoría de los propietarios no se preocupa por tener un plan preventivo, ya que no existe una ley que los obligue a implementarlo.

Testimonio: No recibe ayuda

Dora Toledo, una de las maestras lesionadas en el incendio del restaurante Punta del Este, demandó a los propietarios del negocio, pero no ha recibido ninguna indemnización.

?Tomé la decisión de acudir a los tribunales porque los dueños sólo quieren pagar Q5 mil por daños a las víctimas, lo cual considero injusto, por los efectos físicos y sicológicos que me causaron?, señala.

Las quemaduras que sufrió en la cara, brazos y manos no han desaparecido, pese a seis intervenciones quirúrgicas.

?Extraño a mis alumnos; mi vida cambió totalmente, pues no puedo desenvolverme, por mis limitaciones físicas?, dice.