El monumento, creado por el artista quetzalteco Eduardo Sac, fue erigido al final de la autopista Los Altos, que libra el paso a Cuatro Caminos, en el km 190.
La obra recrea a un migrante de 1980, con el pelo largo, una mochila en la espalda y un pantalón de lona.
El brazo derecho lo tiene alzado hacia el cielo, en agradecimiento a Dios, y la fuente en el contorno representa las lágrimas de los familiares que lo despidieron.