El fenómeno de la canícula se caracteriza por la falta o reducción de lluvias y el aumento de temperaturas.
Esto debido a que los vientos secos no permiten el paso de la humedad, aumentando la sensación de calor en la población.
La canícula suele aparecer después de alcanzar el primer máximo de lluvias en junio. Este fenómeno históricamente e presenta entre las dos temporadas de lluvia. El primero comprendido entre abril y junio y el segundo entre julio y octubre, aproximadamente.
Según el informe de junio del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología y Meteorología e Hidrología (Insivumeh), la canícula afectaría por un lapso de 10 a 20 días en Jutiapa, sur de Chiquimula y sur de Quiché y en el resto del país por 20 o 35 días.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos estableció que este año la temporada se ubicará entre el 15 de mayo y el 30 de noviembre y se presentarán por lo menos 23 huracanes.
En el informe correspondiente a julio del Insivumeh se indica que el pronóstico de ciclones para la temporada entre junio y noviembre es de 16.
Respecto a esto los pronósticos iniciales cambiaron de una temporada de baja actividad por una de mayor. El cambio se produjo por las altas y extremas temperaturas del océano Atlántico.
El informe señala que las temperaturas podrían balancear o superar el efecto restrictivo del Niño.
En las últimas semanas se han presentado una serie de lluvias intermitentes en el territorio. Aparecen las precipitaciones de manera intermitente por algunos días. En lo que va de julio se han presentado ocho ondas tropicales que han propiciado las lluvias por algunos días. El 20 de julio ingresó la onda no. 16 por lo que los últimos días ha llovido, los mayores acumulados han estado en la región Occidente, Bocacosta y altiplano Central. Se caracterizan por ser sistemas que dan paso a mayor nubosidad y tormentas locales con actividad eléctrica. De acuerdo con el Insivumeh, en la temporada de junio a noviembre se espera que se formen 16 ciclones de los cuales la mitad corresponde a tormentas y la otra mitad a huracanes de los cuales tres serán intensos. En promedio una temporada normal presenta 14 ciclones, de los cuales siete son huracanes, es decir que el pronóstico para la temporada se encuentra entre los rangos habituales.
Para este año, es el fenómeno de El Niño el que está presente, razón por la que ha aumentado la sensación de calor y las altas temperaturas. Junio fue el mes más caluroso desde hace 43 años, como confirmaron diferentes meteorólogos. El Niño es el responsable del calor que se ha vivido en el país, el fenómeno se caracteriza porque puede provocar como efectos tanto el aumento de lluvias torrenciales como las sequías. El Insivumeh advirtió que este fenómeno meteorológico se extenderá más de lo previsto y entre octubre y diciembre alcanzará las máximas intensidades. Otro efecto del El Niño es que repercute en la agricultura, debido a la disminución o falta de lluvias. Ante esto, se recomienda guardar agua de las precipitaciones que se presenten, así como tomar precauciones por las tormentas más fuertes. A pesar de la presencia del fenómeno este no prolongará la canícula, aunque suele ser más frecuente cuando es el año del Niño por la disminución de lluvias. El calentamiento periódico es lo que desencadena el fenómeno que suele aparecer cada tres o siete años.
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La canícula continúa, normalmente finaliza en la primera quincena de agosto, sin embargo, este año ha sido interrumpida por distintas precipitaciones. “La canícula normalmente termina el 15 de agosto, pero hablamos de que no iba a ser prolongada, sino que iba a ser interrumpida por lluvias”, detalló George. Las ondas tropicales que han realizado su paso cerca y sobre el país han provocado las precipitaciones en el clima. “De hecho, hay algunas (ondas) que han pasado sobre el país y esperamos la otra para el fin de semana”, advirtió el meteorólogo. Añadió que para la semana se esperaba la presencia de algunas lluvias, las cuales disminuirán y nuevamente se harán presentes lluvias el fin de semana. Por otra parte, George aseguró que la temporada de lluvias dará inicio cerca del 15 de agosto. “Inicia la temporada de lluvias (el 15 de agosto) para alcanzar su segundo máximo en septiembre y octubre”, agregó. En ese sentido, de acuerdo con el informe de la perspectiva climática trimestral de los meses de agosto septiembre y octubre, a partir de la segunda quincena del octavo mes las precipitaciones podrían provocar crecidas de ríos, inundaciones, deslaves, deslizamientos de tierra, daños en la red vial del país y lahares en la cadena volcánica. En cuanto a septiembre y octubre, se espera el paso contante de ondas del este y el acercamiento de la Zona de Convergencia Intertropical, que se refiere a un área de baja presión cercana al Ecuador donde convergen los vientos de los dos hemisferios. El informe señala que tales condiciones podrían favorecer a que se presenten días con abundante nubosidad, lloviznas y lluvias intermitentes.
