Esa noche, Lucas dijo: “Empiezo la campaña con la absoluta confianza en el triunfo electoral que obtendré en las elecciones presidenciales por realizarse el primero de marzo de 1978”.

Lucas ofreció esa noche en la sede de ambos partidos un discurso encendido sobre los problemas y soluciones para Guatemala. No cabe duda de que uno de los máximos retos que le esperaba era la reconstrucción del país, el cual había quedado devastado por el cataclismo del año anterior. Además, el conflicto armado interno estaba en apogeo.

En otra parte de de su discurso, Lucas aseguró que disminuiría la violencia y que aplicaría medidas drásticas para disminuir el alto costo de la vida.

Además, ofreció trabajo, paz, bienestar e ingreso de capital extranjero “una vez no venga a desplazar al capital guatemalteco”.

“No necesitamos que países extranjeros elaboren nuestros planes de acción ni que nos dicten normas de conducta”, indicó esa vez en todo airado.

Era la primera que dos emblemas con ideología similar se unían para luchar por la Presidencia: el mapa del PR y la mazorca del PID. En referencia a dichos símbolos, Luchas dijo entonces que eran símbolos nacionalistas y que reflejaban los ideales de los guatemaltecos.

“Abrazo a los miles de guatemaltecos que a partir del 1 de julio de 1978 gobernarán a Guatemala con el general Lucas”, finalizó.

Un dato curiosos es que 37 años después otro candidato presidencial también ofrece “gobernar con el pueblo”, en un discurso similar al emitido por Lucas García aquel 5 de julio de 1977.

Efectivamente, Lucas García ganó las elecciones, al vencer al ya desgastado general Enrique Peralta Azurdia, con más del 40 por ciento de los votos.

Binomio

Para mejorar la imagen de su binomio presidencial incluyó al doctor en derecho Francisco Villagrán Kramer como el candidato a la Vicepresidencia. Villagrán Kramer era un hombre de reconocida trayectoria democrática, había participado en la Revolución de 1944, y estaba vinculado a los intereses de las empresas transnacionales y de las élites, pues era uno de los principales asesores de las gremiales agropecuarias, industriales y financieras de Guatemala.

De esa gestión, a la cual renunció Villagrán Kramer, los guatemaltecos recuerdan las ocurrencias de un ingenuo y hasta en entredicho Lucas versus la serenidad y talento de Villagrán Kramer.

Todo el discurso jocoso en torno a Lucas jamás sería olvidado.

Irónicamente, Lucas no terminó el mandato presidencial, porque fue derrocado por el entonces joven general José Efraín Ríos Montt, el 23 de marzo de 1982.

Ríos Montt estaba entonces ansioso de llegar al poder, porque, argumentaba, en las elecciones presidenciales de 1974 Kjell Laugerud había ganado mediante fraude.

De los personajes mencionados solo sobrevive Ríos Montt, quien enfrenta proceso por genocidio.

Efraín Ríos Montt, el 23 de marzo de 1982, cuando le dio golpe de Estado a Romeo Lucas. (Video: Youtube)