Ribeiro fue apresado ni bien pisó la terminal de la ciudad sede de los Juegos Olímpicos 2016, adonde había llegado voluntariamente desde Estados Unidos tras ser informado que tenía un pedido de captura internacional.
La justicia de Brasil acusa a Ribeiro, representante legal del exjefe del área internacional de Petrobras Néstor Cerveró, actualmente en prisión, de obstaculizar las investigaciones y evitar que su cliente firmara un acuerdo con la fiscalía para develar el multimillonario fraude a la estatal a cambio de una menor condena.
El fiscal general, Rodrigo Janot, señaló que Ribeiro se había confabulado con el senador oficialista Delcidio Amaral y el CEO del banco brasileño de inversión BTG Pactual, André Esteves, para ofrecerle a su cliente una vía de escape hacia España, vía Paraguay, y una mesada de 13 mil dólares mensuales para su familia si permanecía en silencio.
Según la fiscalía, Amaral y Esteves habían sido mencionados por Cerveró en un testimonio sobre la compra irregular de una refinería en Estados Unidos por parte de Petrobras.
Delación
El fiscal general expresó también su perplejidad por la revelación de que una parte del acuerdo de colaboración premiada de Cerveró con la justicia brasileña -un documento ultraconfidencial- llegó a manos de Esteves, de 47 años y poseedor de una fortuna de 2.100 millones de dólares según la revista Forbes.
“Lo dijo Delcidio, pero es falso (…) André no tuvo acceso en ningún momento a esa delación. No encontraron (ningún documento)” , dijo a la AFP el abogado del banquero, Antonio Carlos de Almeida Castro.
La orden de la Corte Suprema es que Esteves cumpla cinco días de detención, que podrían extenderse a diez, como forma de evitar interferencias. Pero su abogado afirma que el CEO del banco BTG Pactual no conoce a Cerveró, ni a su hijo, ni a Ribeiro, arrestado el viernes de mañana en un aeropuerto de Rio.
“Esteves es un player (actor) del mundo financiero y se encuentra institucionalmente con varios senadores durante el año. El senador Delcidio era presidente de una comisión que trataba un asunto de repatriación de dinero desde el exterior y entonces muchas veces conversaba con él” , señaló.
Amaral permanece detenido en Brasilia, donde ya hizo una primera declaración ante la Policía.
La estafa a Petrobras, apodada “Petrolao” , es considerado el mayor escándalo de corrupción de la historia de Brasil.
Según la investigación, las mayores constructoras del país formaron un cartel para manipular licitaciones de Petrobras mediante el pago de sobornos a directivos de la estatal vinculados a partidos políticos, que luego eran distribuidos entre los confabuladores.
La justicia estima que esa red drenó al menos 2 mil millones de dólares de la petrolera, que era sinónimo de futuro en la séptima economía del mundo.
