La exalcaldesa de 68 años, que estuvo al frente de la ciudad entre 1991 y 2015, era la más alta responsable del partido a nivel local, por lo que resulta “imprescindible continuar la investigación (sobre los hechos) y sobre la participación en ellos de la persona aforada Doña María Rita Barberá Nolla”, estimó el tribunal en su escrito.
Barbera es una de las figuras emblemáticas de la derecha española, considerada hasta hace poco cercana a Mariano Rajoy y a la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría.
El caso “Imelsa”, por el nombre de una empresa implicada, investiga presuntas adjudicaciones públicas trucadas, gracias a las cuales algunos cargos locales habrían cobrado comisiones ilegales que podrían haber transferido a la sección local del partido para financiarlo.
La justicia, señala el máximo tribunal en un comunicado, detectó aportaciones de mil euros realizados por medio centenar de personas ligados al partido entre el 23 de marzo y el 16 de abril de 2015, entre ellas la propia Rita Barberá.
El escándalo estalló tras las elecciones legislativas del 20 de diciembre, en las que el PP llegó primero pero con una ventaja muy ajustada, y sin poder entablar alianzas para formar una mayoría en el Parlamento, muy fragmentado en cuatro grandes partidos políticos.
Pese a nuevas legislativas celebradas el 26 de junio, los partidos siguen sin llegar a acuerdos, por lo que España continúa bajo un gobierno en funciones de Mariano Rajoy.
El PP de Rajoy ha sido muy golpeado por escándalos de corrupción, pero los casos han alcanzado en España tanto a la derecha como a la izquierda, e incluso a los sindicatos.
La investigación a Barberá se conoce cuando Rajoy sigue buscando aliados para formar un nuevo gobierno.
“Soy una persona honrada, no soy corrupta ni desde el punta de vista económico ni moral”, había afirmado Barberá en febrero, cuando dijo sentir un “inenarrable dolor” por las sospechas sobre ella.
