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De allí que todos esperamos el momento de ser inmunizados, pero la prioridad, según cada país, son los trabajadores sanitarios y los adultos mayores.
Esta historia eriza la piel. Javier y José García, de 10 y 6 años, hicieron lo que tuvieron a su alcance para que su bisabuelo Victorio, 76, pudiera ser inyectado.
A falta de dinero y de apoyo para cumplir con el bisabuelo, Javier usó un carruaje de bebé para llegar hasta el centro sanitario de Oaxaca, México, donde fue la vacunación.
Como no tenía yo cómo ir, cómo trasladarme, se le ocurrió a mi chamaquito, dice “lo yo llevo en la carriola, para que pueda usted caminar”, órale pues le digo, ahí vamos, ahí vamos”. Victorio García.
La historia causa más emoción puesto que Javier expuso su salud al llevar a Victorio pues púrpura trombocitopénica, enfermedad del sistema inmunológico que ataca las plaquetas y en la práctica le causa mucho dolor al caminar. Además, puede desangrarse si está mucho tiempo al sol o si carga cosas pesadas.
La historia conmovió a la comunidad y la ciudad Santa Cruz Xoxocotlán le entregó una silla de ruedas a Victorio para que pueda acudir con más comodidad a su segunda dosis. Además, introdujo a la familia de Javier en un programa de combate a la pobreza.
