Trump sopesa usar Guardia Nacional en redadas de inmigrantes

El borrador de un memorando obtenido por The Associated Press esboza una propuesta del gobierno de Donald Trump que está en análisis para la posible movilización de hasta cien mil efectivos de la Guardia Nacional para detener a inmigrantes sin autorización en Estados Unidos.

El documento de 11 páginas llama a una militarización sin precedentes en la aplicación de las leyes de inmigración en sitios tan al norte del país como Portland, Oregon, y tan al este como Nueva Orleans, Luisiana.

El proyecto incluye cuatro estados fronterizos con México — California, Arizona, Nuevo México y Texas— y otros siete contiguos a esos cuatro: Oregon, Nevada, Utah, Colorado, Oklahoma, Arkansas y Luisiana.

Un funcionario del Departamento de Seguridad Nacional dijo que el documento era un borrador preliminar que no se estudió seriamente y que ni siquiera fue elevado al secretario. Previamente la  AP  había pedido declaraciones a la Casa Blanca el jueves y al Seguridad Nacional el viernes sin recibir respuesta.

Trabajadores de Seguridad Nacional dijeron que la propuesta había sido analizada tan recientemente como el viernes pasado.

Casa Blanca lo niega

El vocero de la Casa Blanca, Sean Spicer, dijo el viernes que el documento “no es de la Casa Blanca” .

“No se están realizando gestiones para hacer lo que se insinúa” , aseguró.

El informe de la  AP  es “100 por ciento falso” y que “no se realizan gestiones para usar la Guardia Nacional para atrapar inmigrantes no autorizados” .

Los gobernadores de los 11 estados tendrían poder de decisión sobre la participación de sus efectivos, de acuerdo con el memo escrito por el secretario de Seguridad Nacional, el general de Marines retirado John Kelly.

Se han utilizado efectivos de la Guardia Nacional en misiones relacionadas con la inmigración en la frontera con México, pero nunca de manera tan amplia ni tan al norte del país.

El memo está dirigido a los entonces directores interinos de dos agencias: el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos  (ICE por sus siglas en inglés) y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos  (CBP por sus iniciales en inglés) .

Se supone que el memorándum serviría de guía para la aplicación del decreto ejecutivo sobre inmigración y seguridad fronteriza que Trump firmó el 25 de enero. Memos como éste son el complemento habitual de las órdenes ejecutivas.

El proyecto, fechado 25 de enero, dice que la tropa participante estaría autorizada a “realizar las funciones de un agente de inmigración en relación con la investigación, aprehensión y detención de extranjeros en Estados Unidos” .

Dice que los efectivos serían activados de acuerdo con un programa de colaboración entre los estados y el gobierno federal y dice que el personal estaría autorizado a realizar cateos e identificar y arrestar a inmigrantes no autorizados.

El Departamento de Seguridad Nacional no respondió a los pedidos de declaraciones.

El borrador circula entre el personal de Seguridad Nacional desde hace dos semanas. El viernes, empleados de diversas oficinas informaron que se habían iniciado las discusiones respectivas.

En caso de aplicarse, la medida tendría consecuencias significativas. Casi la mitad de las 11.1 millones de personas que residen en Estados Unidos sin autorización viven en 11 estados, de acuerdo con cálculos del Centro de Investigaciones Pew, con base en el censo del 2014.

Promete nuevo decreto sobre migración

Trump, adelantó este jueves que la próxima semana emitirá un nuevo decreto sobre inmigración después de que el primero, que vetaba la entrada de inmigrantes y refugiados al país, fuera suspendido por la justicia.

“Voy a emitir un nuevo decreto en la próxima semana, que protegerá nuestro país de forma amplia” , dijo Trump en una conferencia de prensa en la Casa Blanca.

El presidente republicano ordenó hace tres semanas prohibir la entrada a Estados Unidos a refugiados y ciudadanos de siete países de mayoría musulmana, lo que generó un gran caos en los aeropuertos y levantó una ola de protestas en todo el mundo.

Pero una corte de Seattle  (noroeste del país) suspendió la medida, decisión que avaló posteriormente un tribunal de apelaciones en el que fue el primer gran revés del gobierno de Trump.

El Departamento de Justicia informó que el gobierno abandonó la apelación del decreto en una moción presentada ante la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito  (con sede en California) , y adelantó que el gobierno prepara otro decreto que eliminará los cuestionamientos a su inconstitucionalidad.

El mandatario dijo a la prensa que el nuevo decreto estará “muy ajustado”  a la decisión de la corte, aunque reparó que “podemos ajustarlo para obtener de alguna manera más”  de lo que contemplaba la orden suspendida.

“Tenemos algunos de los mejores abogados del país trabajando en eso y la nueva orden ejecutiva está siendo ajustada a la decisión que obtuvimos de la corte” , apuntó.

El mandatario no escondió su enfado con los jueces, señalando que la suspensión fue una “mala decisión” .

Trump también se mostró ambivalente ante el programa “Acción Diferida para los Llegados en la Infancia”   (DACA, en inglés) , que protege de la deportación a jóvenes migrantes indocumentados, y que él prometió acabar durante su campaña.

“Vamos a mostrar un gran corazón” , dijo, evocando su experiencia como padre y abuelo.

El mecanismo DACA fue adoptado en el 2012 por el entonces presidente Barack Obama y permitía regularizar la situación de inmigrantes que llegaron ilegalmente a Estados Unidos como menores de edad y traídos por sus padres.

Para Trump “DACA es un tema muy, muy difícil para mí. Porque tienes estos chicos increíbles -en algunos casos, no todos, en algunos casos tienes narcotraficantes y pandilleros también” .

“Y creo que es muy duro hacer lo que ha ley dice exactamente hay que hacer. (…) La ley es muy, muy dura” , afirmó.