Una fuente militar dijo a la agencia oficial siria, SANA, que el aparato desde el que se lanzó el ataque, ocurrido poco después de la medianoche, partió del lago Tiberíades, aunque no informó de víctimas o daños.
El mando general del Ejército y las fuerzas armadas de Siria advierten de “las consecuencias de este flagrante asalto y confirman la continuación de la guerra contra el terrorismo para su eliminarlo y amputar los brazos que hay detrás”, añadió la fuente.
La agencia siria recordó que el pasado 7 de diciembre varios misiles tierra-tierra fueron lanzados por Israel y cayeron cerca del mismo aeropuerto de Mezze, lo que dio lugar a un incendio aunque sin causar víctimas.
Varias explosiones golpearon en la noche del jueves el aeropuerto militar de la base de Mazzé, en las afueras de la capital siria, informó la televisión estatal siria.
Un corresponsal de prensa escuchó varias explosiones y vio que había llamas dentro del edificio y que el humo era visible desde la capital siria.
La agencia estatal Sana también informó de las explosiones y dijo que varias ambulancias se dirigieron al lugar.
La cadena SANA TV, cercana al régimen, dijo que el aeropuerto había sido bombardeado.
Varias fuentes sirias han denunciado ataques de Israel contra territorios sirios desde que comenzó el conflicto interno, incluyendo ofensivas contra la zona de Mazze.
El ejército israelí no emitió ningún comentario sobre las informaciones.
Violencia
En tanto, al menos ocho personas murieron en un atentado suicida en Damasco, informó el jueves el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH) desde Beirut.
“Ocho personas murieron en un ataque suicida contra (el barrio) de Kafr Susa”, en el suroeste de la capital, dijo la oenegé.
Los atentados son inusuales en Damasco, bastión del régimen de Bashar al Asad quien combate desde hace seis años contra grupos rebeldes.
La agencia de noticias gubernamental Sana informó que al menos siete personas murieron cuando un “terrorista suicida” hizo detonar su cinturón en un club deportivo, sin dar otras precisiones.
Otro sector del barrio de Kafr Sousa es zona restringida ya que alberga ministerios y jefaturas de inteligencia, además de unidades de seguridad.
Los atentados son inusuales en Damasco, bastión del régimen de Bashar al Asad quien combate desde hace seis años contra grupos rebeldes.
El 16 de diciembre, en el último atentado en la capital, fue detonado a distancia el cinturón de explosivos colocado a una niña de siete años que había ingresado en una estación de policía, con saldo de tres uniformados heridos.
En el 2011 dos ataques con explosivos en Kafr Sousa mataron a 40 personas e hirieron a 150, de acuerdo con cifras divulgadas en aquella época por el gobierno sirio.
