“No tienen límite para el ridículo, todos los días es un show”, volvió a criticar el mandatario Maduro, cuestionando la forma en que el hombre que decidió quitarse la ropa y se subió sobre un tanque de las Fuerzas Revolucionarias, solo exigía que ya la Policía Bolivariana no lanzaran bombas de gas lacrimógenas a los manifestantes..
Lo único que llevaba el hombre en sus manos era una biblia y un pequeño bolso cruzado sobre sus hombros, pero las autoridades intentaron dispersarlo con bombas de goma y él resistía pacíficamente cada golpe en su cuerpo, que lucía manchado por el bombardeo.
Insiste en diálogo
Ante las imágenes que le han dado la vuelta al mundo, Nicolás Maduro envió un mensaje a la oposición venezolana, invitando a una mesa de diálogo, a la que según él, durante su gestión en tres ocasiones han sido convocados pero “cuando uno está seguro de lo que es, de lo que cree…uno se sienta hasta con el diablo mismo”.
“He logrado sentarlo por dos o tres veces, pero por un lado se me sientan y por otro lado salen corriendo”, seguía argumentado Maduro en contra de la oposición venezolana.
Carrera de fondo
Las protestas opositoras en Venezuela se intensifican y aumenta la violencia, pero todo indica que el forcejeo entre el presidente Nicolás Maduro y sus adversarios seguirá en las calles.
La oposición lanzó las manifestaciones para reclamar elecciones generales, la libertad de los “presos políticos” y el respeto a la autonomía del Parlamento, único poder público que controla y cuyas decisiones son consideradas nulas por el Tribunal Supremo de Justicia, según un análisis de AFP.
