Gómez amenazó con que podrían dejarle las unidades al Gobierno para que preste el servicio, si no se les otorga el aumento.
El vocero de la municipalidad capitalina, Carlos Sandoval, indicó que por instrucciones del alcalde, Álvaro Arzú, no se autorizará ningún incremento y se multará a quienes cobren más del precio aprobado de Q1.10, y Q1.25 para los domingos.
El presidente Otto Pérez Molina expresó: En el Gobierno “no estamos de brazos cruzados”, si los transportistas pretenden subir el valor del pasaje. Aclaró que la responsabilidad de autorizar el incremento es de la comuna.
Agregó que espera una solución, y para ello se reunirá esta semana con los autobuseros.
El ministro de Comunicaciones, Alejandro Sinibaldi, aseguró que, en caso de paro, el Ejecutivo podría intervenir el servicio, pero confía en un acuerdo en las negociaciones.
Aporte final
El viceministro de Transportes, Guillermo Sosa, indicó que ayer, en reunión con dirigentes de la AEAU, se les informó que no hay fondos para más subsidio, y que en los próximos días se les entregarán los últimos Q35 millones de los Q245 millones que el Congreso aprobó para ese rubro.
“A ellos se les explicó que no hay más fondos, y al único acuerdo al que llegamos fue de entregarles el último pago del subsidio”, explicó.
Sosa, quien también es concejal por el partido oficialista en la capital, indicó que el aumento pretendido es ilegal porque no tiene autorización de la comuna.
En el artículo 120 de la Constitución se establece que el Estado podrá, en caso de fuerza mayor y por el tiempo estrictamente necesario, intervenir las empresas que prestan servicios públicos esenciales para la comunidad, cuando se obstaculice su funcionamiento. Lo mismo indica el artículo 76 del Código Municipal.
Reacción
Rechazo popular
El 24 de abril del 2000, el alcalde Fritz García-Gallont aprobó liberar el precio del pasaje urbano, con el argumento de que la comuna capitalina no tenía fondos para seguir entregando el subsidio. Ese mismo día comenzaron las revueltas contra el aumento. Los empresarios dispusieron cobrar Q1.10 al transporte convencional y Q1.50 al preferencial. Las protestas se intensificaron, y tres días después fue asesinado el periodista gráfico de Prensa Libre Roberto Martínez.
Las manifestaciones dejaron 38 autobuses con daños y uno quemado.
En 1994, en un intento por aumentar el pasaje 32 autobuses fueron quemados; la mayoría, en el campus de la Universidad de San Carlos, al haberse incrementado de Q0.40 a Q0.65 el precio. En esa ocasión murió el estudiante Alioto López Sánchez, por el disparo de un policía.
PDH
Golpea a familias
El defensor de los usuarios del transporte público de la Procuraduría de los Derechos Humanos, Édgar Guerra, dijo que el alza es lamentable, ya que golpea la economía familiar, y pidió que se integre una comisión para tratar el problema.
AEAU
Pasaron 13 años
El vicepresidente de la AEAU, Luis Gómez, indicó que llevan 13 años sin incremento al pasaje y que el subsidio ha sido blanco de muchas críticas, pues no es para ellos, sino para el usuario.
Q245 Millones es el subsidio entregado a los transportistas.