El pasado domingo, varias personas amigas que participaron en la media maratón de la Ciudad, 21K 2015, me contaron que fue muy emocionante cuando los participantes entonaron el himno nacional. Entre los corredores había varios extranjeros que comentaron que les impresionaba el fervor con que los chapines cantaban el himno. Mis amigos respondieron que llevaban cuatro meses cantándolo con ahínco.

Desde abril de este año, el despertar ciudadano forja una nueva historia en nuestra vida nacional. Decidimos rescatar a Guatemala de las garras de la corrupción, del crimen y de la impunidad. Sabemos que no será fácil ni rápido. Pero de lo que sí estamos seguros es que llegamos a un punto de no retorno. Cada batalla que ganemos nos dará aliento para seguir adelante. ¡No desmayaremos!

Las investigaciones de la Cicig y del MP han evidenciado con “pelos y señales” los delitos de corrupción cometidos por las estructuras criminales incrustadas en el Estado. Ya no hay duda de que los cabecillas de la red de defraudación aduanera La Línea eran nada menos que el presidente Otto Pérez Molina y la ex vicepresidenta Roxana Baldetti. Es por eso que, el miércoles 26 de agosto, el juez Miguel Ángel Gálvez resolvió ligarla a proceso. Ahora le toca a Pérez Molina renunciar a su cargo. Ya no es nuestro presidente. ¡Estamos indignados! Nos impresiona su capacidad de mentir de manera tan cínica. ¡Ha traicionado a Guatemala! No le importa el país.

Hoy quiero hacer un breve recuento de algunas lecciones que hemos aprendido. En estos últimos meses nuestra conciencia cívica ha madurado. Las lecciones aprendidas nos servirán de base para construir la “Guatemala justa, inclusiva, próspera, sostenible, solidaria, acorde a los nuevos tiempos que queremos”, agregó el Clarinero.

1. Las manifestaciones cívicas pacíficas, dignas, principiaron el 25 de abril, en la Plaza de la Constitución, para solicitar la renuncia al presidente y a la vicepresidenta, y se mantienen. Surgieron de manera espontánea gracias a las redes sociales. 2. Por primera vez miles de guatemaltecos nos hemos atrevido a expresar nuestra opinión en temas legales como la Ley Electoral y de Partidos Políticos, con el propósito de mejorar la calidad del sistema político nacional. 3. Nos hemos pronunciado abiertamente en contra del poder maquiavélico, ciego y torpe de una gran mayoría de diputados en el Congreso. Ellos, como Pérez Molina, también nos han traicionado. 4. Hemos cobrado conciencia de la importancia de la independencia de los tres poderes en el Estado: Ejecutivo, Legislativo y Judicial.

5. Estamos tejiendo un hilo de conexión entre el campo y la ciudad. Cada vez existe más correspondencia entre las manifestaciones de las áreas urbanas y rurales. 6. Han surgido nuevos líderes jóvenes que guían la opinión pública. 7. Nos ha unido la petición de renuncia a Otto Pérez Molina y la convicción de que nadie es superior a la ley.

Nuestra bandera debe volver a ondear en el viento con su intenso color azul. El celeste desteñido no nos representa. ¡Viva Guatemala!

clarinerormr@hotmail.com