Un nuevo año ha comenzado y con él una lista de los grandes retos y oportunidades que tenemos como país. Lo primero que es importante mencionar es que en el ámbito de la salud, en cuanto al impacto del covid-19, Guatemala viene saliendo de una de las crisis globales que más han impactado a la humanidad, y al ver el saldo en América Latina y el mundo, relacionado con contagios por cada millón de habitantes e incluso fallecidos, así como el impacto en la economía, nuestro país ha salido relativamente bien, y eso da esperanzas para este año, que seguramente deberá enfocarse en la certeza jurídica y en mantener un crecimiento económico sostenido.

En el campo de la certeza jurídica, el mayor reto será fortalecer la capacidad institucional, especialmente en la transparencia y cumplimiento de la ley en los procesos de elección de las máximas autoridades del Ministerio Público, Instituto Nacional de Ciencias Forenses, Procuraduría de los Derechos Humanos y hacia el final del año el de la Contraloría General de Cuentas. Así mismo hay otras dos elecciones importantes que se llevarán a cabo durante el 2022 que son los relatores del mecanismo contra la tortura y tratos crueles e inhumanos y el de la rectoría de la Universidad de San Carlos.

Los procesos de elección de segundo grado, para las autoridades del MP, Inacif, PDH y CGC serán críticos para la justicia en Guatemala. Debe procurarse que la población comprenda las diferentes fases del proceso y cómo diferentes organizaciones tienen una responsabilidad crítica a lo largo de diferentes etapas, de que las personas con los mejores perfiles y que cumplan con los requisitos legales, puedan llegar a ocupar estos puestos, a través de espacios de discusión y diálogo que transmita a la sociedad en general la confianza que el proceso se ha cumplido conforme a derecho.

Si logramos que las elecciones de segundo grado sean transparentes, que fomenten que las mejores personas que cumplan con los requisitos legales puedan participar, seguramente los postuladores en cada proceso estarán en una mejor posición para razonar sus decisiones y mostrar a la población que han tomado su decisión con base a lo que establece la ley.

En el ámbito económico, sin duda el mayor reto es mantener la capacidad del país de crecer por encima del 5.5% y que se mantenga una agenda clara que fomente la competencia, la competitividad y la atracción de inversión en el país, garantizando procesos claros y transparentes que ayuden a elevar la inversión pública, especialmente en infraestructura y capital humano.

Estos retos son una oportunidad para que el Gobierno desde los primeros meses del año pueda priorizar proyectos de infraestructura que sean transformadores, en beneficio de la población y que el impacto de dichas inversiones ayude a que más guatemaltecos se conecten a más mercados, reducir los tiempos y costos de movilización dentro del país y a generar un clima de oportunidades que promueva más y mejores empleos. Y en materia de capital humano, el regreso a clases de los niños y jóvenes, así como la transformación tecnológica enfocada en apoyar el aprendizaje de mejores destrezas para la vida y el fortalecimiento del primen nivel de salud para reducir la desnutrición crónica son también relevantes.

Agradezco que me acompañe un año más en este proceso de reflexión y que a través de este espacio se pueda ir construyendo mayor incidencia propositiva en beneficio de nuestro país que ayude a generar mayor desarrollo para todos. ¡Feliz Año Nuevo y todo lo mejor para usted y su familia!