En 1923, la V Conferencia Internacional Americana, celebrada en Santiago de Chile, acordó mejorar la comunicación terrestre, marítima y aérea, así como las llamadas eléctricas y de correo. Al año siguiente, en el Primer Congreso Panamericano de Carreteras en Buenos Aires, se propuso construir la carretera Panamericana, proyecto reiterado en sendas reuniones de 1929 y 1939.

Desde 1903, EUA poseía un territorio de 1,432 km cuadrados, donde operaba el canal interoceánico, en medio de Panamá. Se convirtió en un blanco durante la II Guerra Mundial. En caso de ataque japonés, nuestro país era la retaguardia. En enero de 1940 se completó la comunicación terrestre muy precaria, entre la ciudad de Guatemala y Panamá. Se mejoraron los aeropuertos de Escuintla y de La Aurora, y se instaló una radio con dos grandes antenas de alcance mundial en lo que hoy es el Campo de Marte. En 1942, los submarinos alemanes casi logran interrumpir la comunicación en el Caribe, lo que resaltó la importancia del tramo estratégico terrestre de vinculación de Centroamérica a la Zona del Canal.

Terminada la guerra se activó la necesidad de completar la conexión panamericana, al aprovechar un período de paz en Sudamérica. El último enfrentamiento bélico tuvo lugar en 1941, entre Perú y Ecuador. No obstante, la carretera de Panamá no se continuó hacia Colombia, por oposición del gobierno de EUA, pues estimaba que ponía en riesgo a la Zona del Canal. Panamá tenía poca población para compensar su vecindad con el país del que se había independizado en 1903; a pesar de haber mutuo reconocimiento en 1922. La migración colombiana se anticipaba como un problema de minorías que afectaba el dominio norteamericano.

Hasta 1971, EUA acordó financiar los 2/3 de una carretera desde la Zona del Canal hacia Colombia. No obstante, se justificó diferir su inicio atribuyendo al hato ganadero de Colombia padecer aftosa. En 1973, Sierra Club paralizó la instalación de campamentos bajo la justificación de proteger la selva. A continuación, EUA anunció que retiraba el ofrecimiento de financiar la carretera. Mientras tanto, colonizadores quemaban el bosque y plantaban pasto para ganadería extensiva. Para evitar la colonización espontánea se estableció el delito de ocupación humana de la selva.

En 1980, el general Torrijos, presidente de Panamá, deseaba dotar de tierra a colonos y realizar la carretera. Con su muerte en un accidente aéreo, en 1981, se paralizó toda acción en el sureste panameño, mientras se colonizó el noreste fronterizo con Costa Rica. Para justificar la falta de apoyo a ese proyecto, en 1986 se creó el Parque Nacional Darién, después llamado Omar Torrijos. La superficie representa la tercera parte de la provincia limítrofe con Colombia, cuya área es una faja regular que sirve de cerco en la frontera.

EUA dejó de ser líder de la libertad de comercio y circulación sin obstáculos entre los pueblos. Tiene temor de la libertad de competencia industrial, aunque sea bajo una producción respetuosa de los derechos humanos y laborales.

El 11 de abril del corriente, en el Ministerio de Relaciones Exteriores, bajo orientación del secretario de seguridad nacional de EUA, Alejandro Mayorkas, la canciller panameña, Janaina Tewaney Mencomo, del gobierno del Partido Revolucionario Democrático, y el de Colombia, Álvaro Leyva Durán, del gobierno del presidente Petro, declararon que hay que acabar con la migración del Darién. Cien mil personas han transitado, sorteando los ríos, abriendo brechas y acampando en medio de la inhóspita selva del tapón del Darién, desde inicio de este año.