A medida que las organizaciones se han hecho más complejas y han ampliado su campo de acción, la importancia de la comunicación a nivel corporativo se ha convertido en uno de los principales elementos para su desarrollo. Nos encontramos en la era digital, en la que todos los canales sociales permiten interacciones a una velocidad que resulta inmediata, lo que hace un requerimiento específico a que la comunicación corporativa tome un papel mucho más relevante y urgente.

En las empresas, cuando la comunicación es gestionada de manera organizada y por medio de un plan de comunicación estructurado en base a objetivos congruentes, los efectos positivos de la comunicación son evidentes; destacando, por ejemplo, la reputación de la organización, incremento positivo de índices dentro de su industria, reconocimiento del público en general y, además, la posibilidad de adaptarse a los cambios que puedan darse en su entorno. Adicionalmente, a nivel interno, fomentar y practicar un estilo de comunicación oportuno y eficaz contribuye a la motivación de los colaboradores, así como a la generación de compromiso ante las tareas corporativas, aportando a un clima laboral positivo.

Se recomienda definir con claridad los elementos adecuados, según diferentes factores de cada empresa, por ejemplo los canales de comunicación y el motivo por el que han sido seleccionados, así como los roles para los ejecutivos dentro de cada proyecto y el estilo de comunicación que se utilizará.

El desarrollo de un plan de comunicación se construye en base a la estrategia corporativa, tomando en consideración su misión, visión y pilares de valor; ya que por medio de este es posible establecer el tono y manera en que la organización podrá transmitir sus mensajes y gestionar los canales de comunicación, tanto a nivel interno como externo. Es importante que el plan de comunicación se pueda compartir con todo el equipo, pues el debido involucramiento, y contar con la claridad necesaria para saber qué herramientas usar, contribuye a una ejecución correcta.

Un buen plan de comunicación empresarial es de mucha utilidad para comunicar la información correcta a los integrantes indicados de cada proyecto y con la periodicidad adecuada; la colaboración en equipo no es un proceso sencillo que se genera por sí solo; es una habilidad que deben construir en conjunto los miembros de cada equipo, por lo que un plan estratégico de comunicación permite aclarar por dónde se deben comunicar los miembros del equipo y dependiendo del nivel de detalle requerido también se puede indicar la frecuencia de la comunicación.

Definir adecuadamente el público objetivo para cada acción de comunicación también contribuye a generar resultados positivos ante cada acción, pues los mensajes, tono, estilo y manera deben ser los adecuados para cada público. La comunicación clara y objetiva es primordial al momento de posicionar un mensaje, el cual también es importante que pueda generarse en el momento indicado.

La implantación de sistemas de comunicación —de manera interna y externa— podrá representar acciones relacionadas a la actualización de la cultura empresarial, y la mejora de las habilidades de comunicación en la empresa requiere una implicación directa de todos quienes puedan estar involucrados, para impulsar y dinamizar el proceso y alcanzar los objetivos definidos.