La mayor parte de las veces, los candidatos presidenciales se dedican a asesorarse en muchas áreas para saber cómo desarrollar sus planes de gobierno, pero en lo que respecta al cambio climático, poco o nada saben, y lo peor es que a muy pocos les interesa. Muchas veces a última hora sus asesores, que frecuentemente distan de ser expertos en el tema, llegan con nociones inverosímiles, y sin el menor indicio de cómo abordar el tema del cambio climático, biodiversidad, agua y demás. No obstante, el cambio climático debe estar presente en las mentes de los futuros candidatos. Por ello les resumo de forma factual lo que les es pertinente saber.

Según el académico Silvel Elías, en Guatemala hay 1,500 comunidades en el altiplano, así como las concesiones forestales en Petén, que deben ser apoyadas por el Estado. Los pueblos indígenas dependen de la naturaleza para su existencia, su salud y sus esquemas de vida. Ellos conservan el 80% de la biodiversidad del mundo que ocupa el 22% de la superficie del planeta. Por ello es importante que su identidad cultural sea respetada.

En la Cumbre Mundial de Cambio Climático de Naciones Unidas (Cop-26), celebrada en Glasgow, Escocia, se determinó que los pueblos indígenas son los que más están contribuyendo a mitigar el cambio climático en todo el mundo, pues mantienen sus territorios ancestrales, esquemas de gobernanza, protegen sus bosques y los bienes naturales. Sin embargo, enfrentan serios problemas con proyectos extractivos en sus tierras que afectan la condición de los bosques, aguas y biodiversidad, y aumentan la vulnerabilidad de las comunidades frente a eventos climáticos extremos, como sequías, huracanes y tormentas tropicales.

En la Cop-15, por diciembre de 2022, en Montreal, Canadá, se reconocieron los derechos de los pueblos indígenas relacionados a tierras y territorios, y Ramiro Batzín, de la Organización Sotzil y copresidente del Indian Institute of Banking and Finance (IIFB), manifestó que nuestros pueblos usan de forma sostenible los recursos naturales, pues coexisten con la Madre Tierra en una forma balanceada, obtienen su alimento, medicamentos y todo lo que les permite sobrevivir, pues vienen de la naturaleza, por lo que demandó el reconocimiento y respeto de los territorios indígenas, el conocimiento tradicional, así como el consentimiento libre, previo e informado.

En la Cop-27, también celebrada en Egipto, en diciembre del 2022, se dio un acuerdo histórico, al contar con un nuevo fondo de Pérdidas y Daños, al que Guatemala podría acceder. Parte de los compromisos en esta cumbre fue limitar el aumento de la temperatura global a 1.5 grados celsius, por encima de los niveles preindustriales. Lo triste es que ya hemos llegado a 1.3 grados celsius más de temperatura, y si llegamos a dos grados más, las sequías serán tan groseras que nos harán recordar el declive de la civilización maya. Nuevas promesas de contribuciones han llegado para disminuir las emisiones de CO2 por un total de más de US$230 millones al fondo de adaptación.

Muchos de nuestros pueblos indígenas ya están en marcha con actividades de mitigación y adaptación, pues saben la gravedad del problema. Al visitar a los chortís y xincas pude observar el grado de adaptación y medidas que toman. ¿Y nosotros, en las grandes ciudades, qué? ¿Y nuestros alcaldes? Esperamos que los candidatos presidenciales y sus equipos tengan la visión de colocar en primer plano el tema del cambio climático en sus estrategias.