En pleno siglo XXI, muchos se lanzan a cargos públicos sin ninguna formación adecuada, en especial en la alcaldía de Guatemala, donde hasta dos médicos —incluido el actual— se atreven a incursionar en problemas urbanos. Con solo un profesional de urbanismo y otros dos más que toman esto de la región empíricamente dentro de sus planes.

Se está ya con problemas de tránsito y ambientales, que llegaron a un punto en el que se ha triplicado la circulación de automotores, con un millón de automóviles que se conducen por las arterias principales y secundarias de la capital, lo que provoca accidentes y atascos viales urbanos y regionales. Desde el 85, muchos trabajos se quedaron en “letra muerta”, como los de administración de Manuel Colom Argueta (1970-1974), quien planificó e inició el Anillo Periférico, construyó una red de colectores, constituyó la Empresa Municipal de Agua (Empagua) y el proyecto de desarrollo de la ciudad: “Esquema Director EDOM” y numerosas obras e inversiones.

Mientras, la ciudad la dejaron crecer de una manera anárquica, tanto en forma como en densidad, 110 hab/ha y uso del suelo. Sin planes en seguridad y de riesgo sísmico, con un desarrollo anárquico, en especial las áreas residenciales, ahora bloqueadas por la seguridad, lo que representa grandes problemas urbanísticos en que poco se ha hecho como: “El Plan Maestro de Transporte” y el “Plan de Met”, “El buen desarrollo del Hábitat de la ciudad de Guatemala”.

Y todavía se sigue viviendo con los feudos municipales sin liderazgo político-técnico. Como no se siguió con el desarrollo de los planes regionales, se crearon problemas como el de Chimaltenango, en que el Gobierno Central se glorifica por haber realizado el famoso paso, con problemas técnicos y sin un estudio de la Región Metropolitana. Sin un sistema de transporte de carácter regional, como por ejemplo trenes con energía aérea, para evitar la contaminación.

Empezando por el exalcalde Álvaro Arzu (QEPD), quien estuvo cinco veces seguidas en la municipalidad y negó la participación de la Municipalidad de Guatemala en la llamada Mancomunidad Metropolitana que son: Mixco, Amatitlán, Chuarrancho, San José del Golfo, San Pedro Ayampuc, San Miguel Petapa, Villa Nueva, Chinautla, Santa Catarina Pinula, Palencia, San Juan, San Raimundo, Fraijanes, Villa Canales, San Juan Sacatepéquez, aprobado por la asamblea respectiva que le dio vida a esta estructura. Donde pudieron haberse tratado integralmente los problemas de los municipios.

Por lo anterior, estos candidatos deberían empezar por enterarse de que el municipio de Guatemala ya no existe. Ahora lo que hay es una ciudad-región, en la que el Gobierno Central es la ciudad de Guatemala, pero que no tiene capacidad para dominar los problemas que recibe de esa estructura regional si no resuelven los problemas colaterales de la periferia. A partir del 4 de febrero, la situación regional empeoró por la destrucción, pérdidas de vidas humanas y la invasión del área metropolitana, cuando la ciudad de Guatemala mantuvo sus servicios intactos, así como su economía. Aunque el ecosistema urbano-regional se rompió totalmente como consecuencia del mal desarrollo posterior, donde los únicos terrenos disponibles fueron los barrancos que muchos de estos fueron ocupados por los invasores.

Aunque los candidatos quieran darle fluidez al problema urbano, si no se toman en cuenta los problemas colaterales que existen en la periferia de la ciudad de Guatemala, como es la avalancha de población que cada día va hacia adentro y hacia fuera, y la falta de visión y regulación urbana regional, no van a solventar los problemas que existen.