VENTANA

Conexión ritual

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Es inevitable. Pongo un pie en Tak’alik Ab’aj (TA) y su mundo verde, frondoso, cósmico, me atrapa. Despierta mis sentidos. Todo vibra en TA. Todo es intenso. Desde el canto de las chicharras por la noche hasta el periqueo de los loros al amanecer. Los colores y los aromas de sus flores silvestres alegran y perfuman el ambiente. Las lluvias son torrenciales. Abrasan los rayos del sol. De TA emana un ritmo natural sagrado. Se percibe que sus antiguos pobladores se relacionaban con una comunidad que iba más allá de la gente, que incluía a las montañas, los animales, los vientos, los ríos, las estrellas. Esa conexión ritual la tallaron en la piedra, la modelaron en el barro. “Fue el diseño básico de su sorprendente ciudad que espejea el universo”, confirmó el Clarinero.

Los astrónomos de TA vincularon la cresta del gran cocodrilo, que simboliza a la Tierra que viaja en el universo, con la cordillera volcánica que se aprecia en su horizonte. Allí marcaron los equinoccios y los solsticios. En el Altar 48, del período preclásico, fue finamente tallado un cocodrilo viajando de norte a sur. Se le relaciona con el 21 de junio, el solsticio de verano. TA fue un gran centro de poder cultural y espiritual y sigue siéndolo. Hasta la fecha acuden a esta milenaria ciudad, desde los cuatro puntos de Guatemala, los ajq’ijab’, los contadores del tiempo, los intermediarios entre el ser humano y el cosmos para realizar ceremonias sagradas. Ello manifiesta que a pesar de la Conquista y la Colonia el hilo de su ancestral cultura permanece.

Los arqueólogos Christa Schieber de Lavarreda y Miguel Orrego dirigen este sitio desde hace 25 años. Gracias a su trabajo, TA es candidato a la nominación como Patrimonio Mundial ante la Unesco. En abril de este año 2015, Christa y Miguel participaron en el simposio The Dimensions of Rituality 2000 Years Ago and Today, en San Francisco, California. El tema encaja como “anillo al dedo” para el sitio. De allí surgió la iniciativa de realizar un Primer Encuentro de Guías Espirituales Mayas en Tak’alik Ab’aj. Abrir un espacio para que los ajq’ijab compartieran sus conocimientos, para que discutieran sus interpretaciones y corroboraran la presencia del pasado en el hoy.

Christa y Miguel eligieron el domingo 21 de junio, solsticio de verano, el día maya “6 E”, que significa camino y guía, para celebrar el evento. Yo tuve el honor de asistir. Participaron 13 Ajq’ijab. Sus ponencias versaron sobre el significado del nawal y los diversos materiales que utilizan para sus ceremonias. Los temas evocaban el mundo vibrante de TA: Las candelas y sus colores. Los diferentes tipos de copal. El uso de plantas aromáticas. El tzité y las ofrendas de sabores como la miel y el cacao. La relación con los astros. El motivo para celebrar un ritual.

El próximo viernes, en mi artículo titulado Las Muñecas, ampliaré el tema de las ponencias y comentaré un feliz hallazgo que manifiesta la directa conexión ritual del pasado ancestral con las ceremonias mayas de hoy.

 clarinerormr@hotmail.com

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