Ayer tuve la oportunidad de formar parte de la inauguración oficial del departamento de educación virtual de la Universidad Panamericana (Upana), de la cual he sido decano de la Facultad de Ciencias de la Comunicación desde su génesis más temprana, hace ya casi 18 años. Fue trascendente el hecho de que el acto se estuviese llevando a cabo en Guatemala mientras yo me encontraba en pantalla ante el público. Como parte del programa tuve el honor de compartir algunas palabras sobre las tendencias y ventajas de la educación virtual —o educación a distancia— como le llaman. Lo hice a través de la plataforma educativa Blackboard, una de las más robustas y estables del mercado y utilizada por el Top 50 de las instituciones universitarias a nivel mundial.

Estaba presente en una pantalla, pero físicamente en Houston. Esa es la virtualidad de la aldea global. Un termino que acuñó el gran visionario y sociólogo Marshall McLuhan hace 43 años para describir la interconexión humana a escala global generada por los medios comunicación, cuando la internet estaba aún en pañales. Pero tenía razón en predecir el enorme potencial, porque las características más esenciales de la virtualidad es la posibilidad de manipular el tiempo y el espacio con sus consecuencias socioculturales. En la educación virtual o a distancia, las posibilidades son amplias para que el estudiante pueda estudiar en cualquier lugar y momento.

El beneficio es evidente porque tanto catedráticos como estudiantes se reúnen, aprenden e interactúan en aulas virtuales sin tener que desplazarse físicamente. En la última década el crecimiento de la educación a distancia se ha multiplicado al grado de que las mejores universidades del mundo brindan programas de licenciaturas, maestrías y doctorados. Esto sin contar los llamados Moocs Masive on Line Courses, una modalidad de educación abierta, por internet, cuya filosofía es la liberación del conocimiento para que llegue a un público más amplio.

El año pasado se celebró en la Upana la VII Conferencia Internacional Guide, con más de 350 participantes de 41 países diferentes. Durante los dos días, los conferenciantes presentaron 78 artículos en sesiones plenarias y paralelas sobre temas claves como el papel de la educación a distancia en los países en desarrollo y en el contexto profesional, criterios de calidad, innovación pedagógica y tecnológica, y posibilidad de utilizar los REA y Moocs en la educación tradicional. El progreso de las tecnologías de información y comunicación (ICT) ha favorecido a nuevas oportunidades para compartir información, recursos y experiencias, acelerando el progreso de la ciencia, tecnología e innovación y promoviendo el desarrollo sostenible y la reducción de la pobreza. Aunque la Upana venía ofreciendo diversas carreras a distancia, crea ahora un departamento completo dedicado exclusivamente a la creación de programas online con altos estándares de calidad y recursos tecnológicos que se utilizan en universidades de renombre como Harvard, el TEC de Monterrey, Stanford y otras; más una amplia gama de herramientas que incorporan múltiples recursos educativos, abarcando diferentes entornos de aprendizaje en la red, como: asignación de tareas, foros, cátedras online, videoconferencias, capacitaciones, seguimiento académico de los estudiantes, evaluaciones en línea, entre otros, y hasta la posibilidad de que cada estudiante acceda a ella desde diferentes dispositivos móviles. La educación superior es un factor decisivo para el desarrollo de nuestro país.

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