Remembranzas

Remembranza: Carlos René Piril

La partida de Carlos René Piril dejó un gran vacío en el corazón de su familia y en el ámbito musical, hacia donde volcó su esfuerzo para apoyar a los artistas nacionales.

Cuando era muy joven, el destino lo llevó a hacer sus prácticas de Contabilidad en la disquera Fonica donde después empezó a trabajar como vendedor. Posteriormente, gracias a su buen desempeño, fue gerente regional de la empresa, en la cual conoció a Aída Ortiz, con quien compartió casi 33 años de vida matrimonial.

Su trabajo consistía en promocionar el material discográfico de los artistas nacionales y extranjeros. Sin embargo, su hermano Rubén recuerda que siempre le daba prioridad al catálogo de música nacional, “para él, el artista guatemalteco siempre estaba primero”, cuenta.

Formó su empresa Ventas y Promociones Especiales (VYPRO), y con su propio estudio de grabación cumplió su meta: apoyar al talento chapín.

El locutor Eduardo Bocaletti y también amigo de Piril comenta que siempre estuvo dispuesto a colaborar para reconocer la labor de los artistas locales.

“Fue un hombre dotado de sagacidad para descubrir el talento artístico. Muchas generaciones trabajaron con él: La Gran Familia, Grupo Inercia, Mario Vallar, Aníbal, César de Guatemala y Valentín de León, entre otros.

“Era emprendedor y visionario. Siempre planeó a largo plazo”, recuerda su esposa. Esta cualidad ha permitido la permanencia de su empresa y que se haya adaptado a los cambios. Inició reproduciendo discos de larga duración (LP); después, casetes; luego discos compactos y DVD. También disponía de un catálogo en línea de más de siete mil melodías de grupos guatemaltecos y se dedicaba a organizar giras con artistas nacionales por diferentes ciudades de Estados Unidos.

Ejemplo para seguir

René fue el mayor de cuatro hermanos, a quienes involucró en su negocio y prácticamente hizo de su pasión una empresa familiar donde prevalecían los valores como confianza absoluta, unidad y respeto. Ervin, el menor de ellos, dice que los apoyaba y respaldaba, y desde un principio esclarecía la función de cada uno. Además de esa buena actitud, los hermanos describen a René como un buen cocinero. “Preparaba muchos platillos exquisitos, especialmente sopa de mariscos”, comentan.

Sus hijos recuerdan con alegría las anécdotas que compartía con ellos. Para Jéssica, Marla y Léster Ronaldo, la honestidad, responsabilidad y la unión familiar eran valores que con el ejemplo les inculcaba.

Sueños cumplidos

Fiel al entusiasmo que siempre lo caracterizó, pocos días antes de su fallecimiento —el 22 de junio—, René preparaba un concierto para los guatemaltecos residentes en Los Ángeles y San Francisco. En este se presentarían Checha y su India Maya, Grupo Fiesta, Ronal y los Bravos, Fidel Funes, y el Grupo Rana.

Un infarto terminó con la prolífera trayectoria de René Piril. Con música de marimba, sus familiares y amigos se despidieron de ese gran ser humano, productor que tanto creyó y apoyó al talento nacional.

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