El Gobierno griego y los acreedores del país concluyeron el viernes una semana de negociaciones sobre los flecos pendientes de la primera evaluación del programa de rescate con avances en la mayoría de temas pero sin un acuerdo final.
Del buen término de esta negociación, que continuará la semana próxima, sobre 15 requisitos pendientes depende el desembolso de un tramo de €2mil 800 millones.
El Gobierno y los representantes de la denominada cuadriga (Comisión Europea, Banco Central Europeo, Mecanismo Europeo de Estabilidad y Fondo Monetario Internacional) abordaron durante esta semana además los temas de la segunda evaluación – entre ellos la polémica reforma laboral, que, según el calendario previsto, comenzará a mediados de octubre.
El jefe del Ejecutivo heleno apuntó ante el congreso de Syriza que en la negociación de dicha reforma laboral buscará “reinstaurar la negociación colectiva” para eliminar el “mito” neoliberal, cuyas recetas, criticó, “han sido aplicadas y han fallado en Grecia, la economía no se ha vuelto más competitiva”.
Tsipras declaró por otro lado que “la economía (griega) da los primeros signos de recuperación”, algo reflejado “en los últimos datos de (la oficina griega de estadísticas) Elsat” ya que “se reduce el desempleo, signo de que algo se mueve”.
El paro bajó en Grecia en el segundo trimestre de 2016 un 1.8 % hasta situarse en el 23.1 % de la población activa, según Elstat.
“Los griegos no nadan en un mar de alegrías, pero ven que a cada paso nuestra preocupación es la protección de los más débiles”, aseveró el primer ministro.
“Hemos cometido errores, no hay duda de ello”, reconoció Tsipras, que sin embargo recordó que “los compromisos presentados en (el programa de) Salónica siguen siendo válidos”y añadió que “muy pronto habrá novedades importantes con respecto a la deuda”.
Sobre la reciente subasta de cuatro licencias televisivas exclusivas de emisión a nivel nacional, el primer ministro dijo que fue un “hito” en el sistema político griego y recalcó que “hasta el último euro” de los 246 millones recaudados “irá a parar a la sociedad griega”.
Tsipras habló también sobre el líder de la oposición conservadora, Kyriakos Mitsotakis, al que calificó de “favorito de los acreedores”, y arremetió contra las medidas que presentó el sábado como alternativa de Gobierno en la feria industrial de Salónica, calificándolas de “peligrosas para la sociedad”.
“Mitsotakis dijo que recortaría 3.500 millones en impuestos”, dijo Tsipras, “si esto era tan bueno, ¿por qué no lo hizo (su partido, Nueva Democracia) cuando estuvo en el Gobierno?”.
Tsipras acusó a ND de haber “matado” los hospitales públicos y el estado del bienestar y aseguró que si Mitsotakis llega a gobernar, desmantelará programas establecidos por Syriza “contra la crisis humanitaria” que vive Grecia.
“Mitsotakis tiene un plan para recortar de la sociedad y devolvérselo a los grandes empresarios”, concluyó el primer ministro.
