Vida

Una buena alimentación es fundamental para el crecimiento sano del bebé 

Si el niño está o no bien alimentado durante los primeros años de vida, puede tener un efecto profundo en su salud, así como en su habilidad para aprender, para comunicarse, pensar analíticamente, socializarse efectivamente y adaptarse a nuevos ambientes y personas.

La alimentación es la base necesaria para un buen desarrollo físico, psíquico y social de los niños.

Una buena nutrición es la primera línea de defensa contra numerosas enfermedades infantiles que pueden dejar huellas en los niños de por vida. Además, están directamente conectadas a través del tiempo de vida, pero la conexión es aún más vital durante la infancia. Es en este periodo que los niños podrán adquirir buenos hábitos durante la comida en lo que se refiere a la variedad o al sabor.

Los efectos de la desnutrición en la primera infancia (0 a 8 años) pueden ser devastadores y duraderos. Pueden impedir el desarrollo conductual y cognitivo, el rendimiento escolar y la salud reproductiva, debilitando así la futura productividad en el trabajo.

Durante el primer año

Leche Materna, si es posible, hasta el 4 – 6 meses.

– Fórmula de inicio —1 hasta el 4 – 6 mes—, si no hay leche materna.

– Fórmula de continuación —2 a partir del 4 – 6 mes— y hasta los 3 años.

– Iniciar el gluten después del 6º mes cumplido.

– Aporte de Vitamina D

– Introducción de alimentos: frutas (4 mes), pollo (5-6 mes), ternera (6-7 mes), pescado (8º mes), huevo (9-10 mes).

– Los cambios de alimentación e introducción de nuevos alimentos se harán poco a poco.

– Alimentos no recalentados ni preparados mas de 8-12 horas antes de ser consumidos por el niño.

– Tener cuidado extremo con las medidas higiénicas durante el primer año de vida e incluso estéril los primeros seis meses.

guiainfantil.com

ESCRITO POR: