Aunque Roberts, de 48 años, es una de las intérpretes más cotizadas de la meca del cine luego de haber ganado el Óscar por su participación en Erin Brockovich (2000), ni sus hermanos quieren saber de ella. La fallecida Nancy Roberts tuiteó en algún momento que muchas veces tuvo ganas de “torcerle el cuello” a Julia.

De acuerdo con las declaraciones de otros famosos, rodar en el mismo set que Roberts se vuelve insoportable. Además, explican que la actriz de La boda de mi mejor amigo, mueve cielo, mar y tierra para que nadie sobresalga más que ella.

Algunos casos

Meryl Streep y Roberts trabajaron juntas en el rodaje de la película Agosto (2014), por la que ambas fueron nominadas al Óscar a mejor actriz y mejor actriz de reparto, respectivamente. Aunque la película fue un éxito, muchas personas aseguran que Roberts quiso boicotear el proyecto para evitar que Streep tuviera más protagonismo que ella.

Los productores de Secretos de una obsesión tuvieron grandes problemas por reunir a dos divas, Nicole Kidman y Roberts, ya que ninguna de las dos estaba dispuesta a ceder su trono de “la más famosa”, así que Julia empezó a difamar a Kidman.

Otra de las víctimas de Julia fue Jennifer Aniston, pues Roberts no ha querido trabajar con la protagonista de Friends por considerarla “demasiado guapa”. Para el rodaje de El día de la madre, los productores lograron que las dos actrices coincidieran muy pocas veces.

No todo es lo que parece

Aunque en la cinta Notting Hill, Hugh Grant y Roberts parecían ser la pareja perfecta, la verdad es que el actor británico no quería topársela fuera de escena. “Tiene una boca enorme y no sabe besar”, dijo Grant en alguna ocasión.

En La gran estafa, Catherine Zeta-Jones fue relegada a segundo plano por los productores de la cinta, ya que Roberts les advirtió que dejaría la película sino la trasladaban a una mansión más lujosa que la de Zeta-Jones. Además, exigió que sus vestidos fueran más caros que los de la actriz británica.

Olvidemos la idea de ver a Julia Roberts en otra película de Steven Spielberg, pues luego del rodaje de Hook (1991), el director estadounidense juró nunca volver a trabajar con la protagonista de Mujer bonita.