El escritor criticó la cultura del espectáculo que impera en la sociedad, antes de ser investido doctor Honoris Causa por la Universidad de Burgos junto al periodista Iñaki Gabilondo.
El trato a la cultura desde la frivolización y banalización es contraproducente y lleva a que los políticos se fotografíen antes con artistas del cine o futbolistas que con escritores, dijo a EFE.
En su opinión, el Nobel de literatura debe distinguir una gran obra que haya marcado un tiempo o la de un autor poco reconocido hasta ese momento y que lo merece, “no el espectáculo de un gran cantante”. El escritor hispano-peruano se ha preguntado si el próximo año van a conceder el Nobel de Literatura a un futbolista.
El 13 de octubre último, Bob Dylan ganó el Premio Nobel de Literatura por “haber creado nuevas expresiones poéticas dentro de la gran tradición musical americana”.
La decisión de la Academia Sueca desató un intenso debate en torno a si es correcto que un premio “literario” sea otorgado a un representante que se desempeñó mayormente en otras artes.
Bob Dylan aún no ha respondido a la Academia Sueca los intentos por comunicarle que ganó el Nobel de Literatura 2016. Esta entidad ya anunció que desistió en su intento por informarle la noticia al músico nacido en 1941.
