¿Por qué ocurre?

El sistema linfático, que es parte del circulatorio, está formado por vasos, ganglios y tejidos. Este produce un líquido incoloro llamado linfa, el cual limpia las impurezas, bacterias y toxinas de la sangre. “Cuando una persona padece de linfedema este proceso se bloquea, lo que ocasiona que se empiece a sentir pesadez en las extremidades, ardor y que el órgano empiece a crecer gradualmente”, explicó Aragón.

La enfermedad puede originarse por dos causas. “El linfedema primario, que es el menos frecuente —10 por ciento de incidencia—, ocurre por alguna malformación congénita y puede aparecer a cualquier edad”, comentó la especialista.

Aragón agregó que el 90 por ciento de los casos se debe a un daño en el sistema linfático, que es causado por cirugías contra el cáncer de mama, cérvix o próstata. “Cualquier operación que implique extirpación de los ganglios es un factor de riesgo para padecer linfedema”, afirmó.

Diagnóstico

Si una persona sospecha que puede padecer esta dolencia, debe buscar ayuda de un especialista, quien efectuará diferentes exámenes y pruebas. “El diagnóstico es relativamente sencillo. El médico puede hacer un análisis clínico con la observación del miembro afectado y el historial del paciente. También es necesario hacer tomografías y resonancias magnéticas para identificar la presencia del linfedema”, aseguró Aragón.

Etapas

El linfedema empieza en la etapa 0, en la que no hay ningún síntoma. “Por ejemplo, todas las pacientes que fueron sometidas a una operación para eliminar un tumor en el seno o fueron expuestas a radiación se encuentran en esta fase. Acá es importante saber cómo podemos evitar el desarrollo del linfedema”, resaltó De Berreondo.

La etapa 1 es reversible y se puede tratar con drenaje del miembro. En la fase 2 aparece la fibrosis y el tejido se endurece. La última etapa se conoce como elefantiasis, ya que el miembro creció demasiado en comparación con el resto del cuerpo.

Tratamiento

La terapia descongestiva completa es el tratamiento menos invasivo y más completo que existe en la actualidad. “Consta de cuatro pasos. En el primero se le enseña al paciente cómo debe cuidarse el miembro afectado, puesto que debe evitar cremas y jabones con alcohol, ya que la piel se reseca y se agrieta”, señaló De Berreondo.

El segundo paso es el drenaje linfático manual, que consiste en una manipulación superficial del sistema linfático, el cual ayuda a transportar la linfa de la parte afectada a donde los ganglios sí funcionan. “Luego está el vendaje de compresión, que se hace con vendas especiales de poca elasticidad. Por último se recomiendan los ejercicios descongestivos, que redirigen el líquido linfático en las extremidades sanas”, puntualizó De Berreondo.

Apoyo

La Fundación Guatemalteca para Linfedema Manos Amigas nació por iniciativa de De Berreondo, quien es sobreviviente de cáncer de mamá y que además padece linfedema. En esta institución participan activamente varias personas, como Aragón, quienes dedican sus esfuerzos para brindar terapias y ayudar física y emocionalmente a pacientes con linfedema.

CONSEJOS NECESARIOS

Buscar ayuda  profesional cuando aparezcan síntomas como sensación de

 pesadez en alguna parte del cuerpo, ardor e incremento gradual en el

 tamaño del miembro —hinchazón—.

Someterse a  algún tratamiento contra el cáncer puede ser un factor de riesgo.

También influye el sobrepeso y el sedentarismo.

Padecer linfedema también afecta emocionalmente a la persona, por lo que se recomienda buscar grupos de apoyo.

Es importante evitar el uso de prendas de vestir ajustadas o joyería pesada.

Debido a que las vendas compresivas deben utilizarse en todo momento, en la actualidad existen de varios colores, para que se puedan combinar con la ropa.

Es fundamental que los pacientes no confundan masaje con drenaje linfático. El primero puede alterar la condición, mientras que el segundo  corresponde a una técnica especial para lograr que el linfa no se acumule en el miembro.

500 millones de personas en todo el mundo viven  con este  padecimiento del sistema linfático.

1 mujer de cada tres que fueron sometidas a una extirpación de ganglios padece de linfedema.