Salud y Familia

El baile como acto de amor propio: Los beneficios del movimiento en la vida

Fomentar distintos tipos de bailes ayuda a que las personas enriquezcan su autoconocimiento y a la vez, ejerciten su cuerpo y cerebro.

Beneficios mentales y físicos del baile

Las personas somos capaces de bailar gracias a la relación que tenemos con la voluntad, el ritmo y la emocionalidad. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)

La especie humana baila desde hace miles de años, ya sea en solitario o en grupo. Las personas han encontrado en la danza muchas formas de evocar procesos vitales que van desde la convivencia con otros, los modos de cortejo, ritos espirituales, o bien, como oportunidades de sanación y de expresión creativa.

El baile y el movimiento corporal de las personas ha surgido gracias a razones existenciales. En su publicación El origen antropológico de la danza, la Doctora en Humanidades Gaël Lévéder apunta que el impulso del baile ha aparecido gracias al desarrollo humano de la sensación y reacción física frente al ritmo, mismo que se entiende como una destreza fundamental para lograr el desplazamiento corporal o bípedo en la evolución humana.

Lévéder señala cómo durante sus carreras investigativas, los musicólogos Curt Sachs y John Blacking coincidieron en el reconocimiento de las emociones como una suerte de detonante entre la música y el movimiento del cuerpo, ya que a través de este se pueden establecer puntos que “permiten resonar con otras personas del entorno al hacer música o danzar en conjunto”.

Por otro lado, en el artículo Antropología y danza, escrito por Ada Rabago, la autora explica que para que el movimiento sea considerado una danza debe ser ejecutado no solo como resultado de características físicas propias del cuerpo, sino que debe ser “un movimiento elegido en forma consciente” respecto a un gran número de posibilidades móviles.

Asimismo, Rabaga apunta que todo movimiento corporal se produce y coordina por la interacción de distintos centros cerebrales, incluyendo la corteza motora, el cerebelo y los ganglios basales. En estas partes se desarrolla información sensorial.

Tomando en cuenta esto, resulta importante hablar del valor del movimiento en nuestras vidas y, sobre todo, el origen de este acto y los amplios beneficios que ha dado a las personas.

Impacto en la salud física

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), cualquier tipo de movimiento -incluido el baile- podría favorecer en distintos ámbitos de la salud física.

Uno de los padecimientos que podría contrarrestar el baile y el movimiento corporal es la cardiopatía. De acuerdo con el portal Medline Plus, esta enfermedad consiste en el estrechamiento de pequeños vasos sanguíneos que suministran sangre y oxígeno al corazón, lo que provoca dolores en el pacho, infartos o accidentes cerebrovasculares.

Esta enfermedad suele ocurrir mayoritariamente en hombres y surge debido a la acumulación de placa en las arterias que van hacia el corazón y que endurecen las arterias. Esto es provocado por la saturación de grasas o colesterol, y en muchas ocasiones, se atribuye al sedentarismo.

Beneficios mentales y físicos del baile
La práctica del movimiento ayuda a evitar enfermedades tanto cardiovasculares e incluso mentales. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)

Según la OMS, la falta de actividad también puede provocar la diabetes tipo 2. Este padecimiento surge cuando los niveles de glucosa o de azúcar en la sangre son muy altos, y en consecuencia aparecen trastornos en los sistemas circulatorio, nervioso e inmunitario.

De acuerdo con el instructor de baile Cris Mendizabal el baile como ejercicio de movimiento -e indistintamente del género o la técnica- puede mejorar la circulación, así como aporta a que se incremente la flexibilidad, la velocidad, y la resistencia corporal.

La Organización Mundial de la Salud apunta que la actividad física puede evitar la muerte de 5 millones de personas al año. No obstante, la organización señala que para 2020, uno de cada cuatro adultos y cuatro de cada cinco adolescentes no realizaban suficiente actividad de esta índole.

Beneficios emocionales y mentales del movimiento

Toda actividad física también puede beneficiar la salud mental. La psiquiatra Amanda Terraza señala que, por un lado, el movimiento corporal incrementa el flujo sanguíneo y la oxigenación que aporta a los tejidos incluyendo el cerebro.

A largo plazo, este tipo de actividades mejoran la calidad de masa encefálica, por lo que el cerebro se hace más grande y se aumenta la segregación de sustancias como las endorfinas, las cuales son neurotransmisores que propician sensaciones de alivio y de bienestar.

Bailar también puede ser una resistencia frente al decaimiento. “Puede ayudar a reducir síntomas de ansiedad y depresión; aunque no los curan, ayuda a que haya menos síntomas. Incluso en procesos terapéuticos y psiquiátricos se llega a recomendar este tipo de actividades como coadyuvantes”, señala Amanda.

Beneficios mentales y físicos del baile
El movimiento corporal ayuda a que las personas fomenten una mayor concentración. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)

La doctora agrega que el movimiento puede prevenir ciertos trastornos cognitivos como las demencias y el Alzheimer.

Además, se trata de un gran aliado del placer y la creatividad puesto que ayuda a romper con la rutina y hace a un lado la rigidez. “Podemos escoger cómo mover el cuerpo, cómo nos expresamos y esto ayuda a aumentar las capacidades de creatividad”, agrega Terraza.

Asimismo, la especialista subraya que todas las actividades como el baile responden a inclinaciones fisiológicas que pueden ayudarnos a aprender sobre coordinación, así como autoconfianza en las capacidades que se tienen, y esto decanta en una posible mejora del autoestima.

Así lo confirma Regina Vásquez, comunicadora de 26 años quien desde pequeña había estado inclinada a la actuación y el baile, hasta que llegados sus 20 años dejó de involucrarse.

Regina comparte que, en esa época, la ansiedad y un cúmulo de emociones negativas que referían a su autopercepción le afectaron al punto de querer alejarse de la expresión corporal. Regresó cuatro años después cuando gracias a la propuesta de su cuñada volvió a involucrarse en el baile.

Beneficios mentales y físicos del baile
Ritmos como la salsa y el merengue suelen implicar destrezas móviles en dupla. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)

Experimentó con dos géneros musicales: el urbano, dancehall y el twerk (o perreo), pero fueron estos últimos dos que asegura, la transformaron emocional y mentalmente. Ambos bailes son influenciados por ritmos caribeños y africanos, y se representan con movimientos pronunciados, extrovertidos, rápidos y considerados “sensuales”.

Estas características llevaron a que Regina lograra desenvolverse corporalmente y, sobre todo, a que se sintiera más cómoda consigo misma.

“Me he sentido más empoderada como mujer. Al principio era algo que me daba pena porque en el twerk debía tocar y mover mucho el cuerpo, pero luego entendí que así era el estilo. También comprendí que la sociedad nos ha enseñado a tenerle miedo a la exploración del cuerpo, pero no creo que deba ser así porque se trata de nuestro primer hogar”, comparte la joven.

Regina cuenta que el conocerse desde el movimiento le ha permitido mejorar su autopercepción: “Crecí con autoestima baja y por años había buscado una disciplina que me permitiera sentirme mejor conmigo misma, y puedo decir que el baile me ha dado más confianza. Creo que bailar da tanto y es un acto de amor propio”.

Por otro lado, Vásquez explica que su coordinación mental ha logrado agilizarse en las coreografía, así como también ha logrado hacer de esta una forma de meditación puesto que debe enfocarse para sincronizar su cuerpo con el ritmo.

Algunos tipos de baile

En el país son muchas las academias que ofrecen cursos para que personas de cualquier edad aprendan a bailar. Estas son las características de varios de los ritmos populares en el país:

Salsa y Merengue

De acuerdo con Alex Aquino y Majo Borrayo, directores de la academia In Motion Dance & Fitness, la salsa y el merengue implican movimientos en pareja donde está presente un juego constante en los pies y brazos. A través de varias combinaciones, las personas pueden aprender a lo largo de los niveles principiante, intermedio y avanzado.

Para dominar estos ritmos musicales, Aquino y Borrayo sugieren que las personas le dediquen una hora diaria. No obstante, el aprendizaje puede variar por persona aunque muchas veces los jóvenes tienen mucha ventaja de perfeccionar los ritmos, puesto que empezarán a adentrarse desde temprana edad.

Baile urbano

Se trata de un estilo que se ha popularizado más allá de las mismas academias, ya que se inspira de bailes independientes y desde un sentir de libertad y que se expresa ante la problemática social. De acuerdo al instructor Cris Mendizabal, este tipo de baile es bastante fluido y se nutre de preguntas que van desde el ¿Por qué y para qué bailo?

Además, toma en cuenta distintos ritmos musicales. Para practicarlo, se recomienda hacerlo en un espacio con muchos espejos, buenos aparatos de sonido y ropa cómoda (pants, tenis y playeras). De acuerdo con Mendizabal, cualquiera puede practicarlo, y uno de los retos más grandes que supone es “dejar la pena a moverse” y entender que todas las personas tienen procesos de aprendizaje distintos.

Beneficios mentales y físicos del baile
El baile urbano es una muestra de la importancia que tiene la libertad a la hora de compartir con el mundo. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)

Danza creativa

Este tipo de baile suele mostrarle a los bailarines que lo primordial es la experimentación, la libertad y el juego lúdico. Para este tipo de ritmo no se necesitan conocimientos previos, ya que la danza creativa surge de la exploración del espacio, el cuerpo y el ritmo, explica Julio Ramírez, Director del Programa Municipal de Danza Creativa.

La danza creativa puede ser practicada por personas desde los 4 años en adelante. Para empezar a adentrarse se requiere una práctica de entre 1 a 3 veces por semana. En cuanto al vestuario, se requiere de leotardos, medias, pantalonetas de licra, calcetines y zapatillas. Este tipo de baile se acompaña además de distintos ritmos musicales y se puede acompañar  de implementos como conos, aros, esponjas o pelotas.

Ballet

A consideración de Ruiz Alexander Pocón, docente de la Escuela Municipal de Danza Clásica de la Municipalidad de Guatemala, el ballet es un “complemento de sentimientos, movimientos y cosas racionales, así como irracionales“, que permiten una conexión con la vida misma.

Algunos beneficios de este baile que puede empezar a practicarse desde temprana edad consiste en el manejo de espacios y la contemplación de sentimientos. El profesor señala que entre más pequeñas sean las personas de edad su memoria podrá adaptarse mejor a los movimientos.

Para practicarlo, las personas requerirán de una vestimenta que incluya leotardo, zapatillas, mallas y camiseta. El especialista entrevistado agrega que uno de los mayores retos en este baile consiste en derribar los estereotipos que apuntan a que “solo las mujeres hacen ballet”, ya que cualquier persona puede practicarlo.

 

ESCRITO POR:

Alejandro Ortiz

Periodista de Prensa Libre especializado en temas sobre cultura y bienestar, con 5 años de experiencia.