“Los calambres más comunes son en las piernas, pero también nos pueden dar en los pies, sobre todo en los dedos; en las manos, brazos y hasta en el estómago. Ocurren usualmente cuando el músculo está muy tenso, cuando lo hemos sobrecargado o lesionado, por eso suele dar después de hacer ejercicio”, explica Carlos Gutiérrez, médico internista.
Todas las personas en algún momento hemos tenido calambres que duran algunos segundos o minutos. Cuando la contracción termina, el músculo puede quedar adolorido por un breve momento o por varios días. Sin embargo, estos no suelen ser perjudiciales para la salud.
Entre los tipos más frecuentes de calambres en las piernas son los benignos idiopáticos, los cuales se dan en ausencia de un trastorno causal y suelen molestar en la noche; también los calambres musculares asociados al ejercicio, que ocurren durante la actividad física o inmediatamente después, se detalla en el Manual MSD.
Causas de los calambres musculares
Los espasmos musculares suelen ocurrir cuando el músculo está forzado o lesionado. Lo que podría afectar a que se den los calambres en las piernas luego de hacer ejercicio es estar deshidratado o no hacer los estiramientos correspondientes, que ayudan a preparar el músculo para la actividad física.
También tener bajos niveles de potasio, magnesio o calcio y sufrir de trastornos metabólicos o neurológicos podrían causar estas contracciones musculares. Así como algunos fármacos y las diálisis, en quienes tienen enfermedad renal terminal, pueden provocar calambres.
De acuerdo con Laura Aldana, médica general, los adultos mayores, las personas con sobrepeso, las mujeres embarazadas y los deportistas son más propensos a sufrir calambres musculares. Asimismo, pueden ser síntoma de una enfermedad nerviosa y tiroidea.
¿Por qué dan calambres en la noche?
La mayoría de los calambres en las piernas que dan en la noche es por cansancio muscular y problemas nerviosos. Mientras que los calambres en los músculos de la pantorrilla o del pie están relacionados con “la anamnesis y en la ausencia de signos físicos o de discapacidad”, dice el Manual MSD.
Cómo prevenir y eliminar los calambres
Para prevenir los espasmos musculares en la noche se recomienda hacer estiramientos durante varios minutos antes de dormir, también aplicar algún tipo ungüento que ayude a relajar el músculo. También se recomienda hacer ejercicios ligeros, como usar la bicicleta fija por varios minutos antes de acostarse.
Durante el día, cuando haga alguna actividad física fuerte, no olvide beber líquidos con regularidad. También continúe tomando agua sin cafeína ni alcohol después del ejercicio.
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Acuerdo con el naturópata Eduardo Contreras, existen algunos remedios caseros que podrían ayudar a disminuir los calambres en las piernas durante la noche:
- Licuado de banano y yogurt: el banano es un fruto rico en potasio, por lo que se recomienda tomar un vaso todos los días antes de dormir para crear impulsos electrolitos.
- Comer plátano y su agua: este es otro fruto rico en potasio, por lo que además de comer el plátano, se puede tomar el agua en el que se cocina. Lo ideal es cocinarlo con cáscara.
- Jugo de fresa y marañón: la fresa es rica en potasio, fósforo y vitamina c; mientras que el marañón aporta magnesio. Al licuado puede agregarle agua de coco, para darle un mejor sabor. La recomendación es utilizar una taza de fresas y una cucharada de marañón.
- Licuado de remolacha y manzana verde: ambas frutas tienen propiedades antiinflamatorias, además de que tienen minerales que ayudan a combatir los calambres. Utilice tres ramas de apio, una manzana, una remolacha y medio vaso de agua. Tómelo dos horas antes de dormirse.
