La experta en tecnología y comunicación habló con Prensa Libre acerca de esta oportunidad, que representa un logro para el país.

No solo será la primera guatemalteca, sino también la primera centroamericana en este programa mundial. ¿Qué representa este logro?

Es un honor y una gran responsabilidad. Siento un compromiso muy fuerte de regresar a mi país y compartir esos conocimientos. Lo importante es replicar todo lo que aprenda, ya que actualmente dedico mucho de mi tiempo a dar charlas y conferencias a jóvenes y mujeres. Quiero crear redes de mujeres líderes que hagan un cambio en la sociedad.

¿Qué espera de esta oportunidad?

Nos analizaron para determinar en qué momento nos encontramos como empresarias y mujeres. Debido a que todos tenemos fortalezas y debilidades, me dijeron que debo mejorar mis estrategias financieras, ya que mis habilidades creativas y tecnológicas son muy grandes. Con esto podré perfeccionar las tácticas para buscar inversionistas.

También estoy emocionada porque conoceré varios centros de innovación, en los cuales predicen qué tecnologías y tendencias vendrán en el futuro.

¿Cuál considera que es el papel de las mujeres líderes en el mundo?

Las mujeres contemporáneas crecimos con la mentalidad de ser independientes, profesionales e iguales a los hombres. Primero hay que entender que nunca fuimos diferentes, salvo en los aspectos obvios y lógicos. Nuestro papel es tomar el rol de líderes y formadoras. No necesariamente hay que ser madres para educar, ya que podemos ayudar a todos los que nos rodean.

Este éxito es reconocimiento a su esfuerzo y al impacto de la compañía MILKnCOOKIES…

Siempre he creído en Guatemala. Debido a que he trabajado en otros países y en corporaciones nacionales, entendí que mi meta personal es poner el nombre del país en alto. Por eso, MILKnCOOKIES maneja estándares de calidad de escala internacional. En mi grupo de trabajo jamás nos hemos conformados con lo establecido y siempre vamos más allá.

Otro aspecto que marca la diferencia es nuestra calidad humana. Queremos dejarle un mundo mejor a las generaciones. Jamás damos soborno para que nos acepten un proyecto y les pedimos a todos nuestros colabores que paguen sus impuestos. Solo trabajamos con clientes que impacten positivamente en el país. Creemos en la tecnología con corazón.

¿Cuáles son los obstáculos que ha tenido que superar para lograr ese objetivo?

El reto más grande de cualquier empresa de innovación es el financiamiento. También hemos luchado para desarrollar disciplina. En Guatemala hay gente trabajadora e inteligente, pero necesita saber cómo planear, organizar y ejecutar sus proyectos.

Jamás me he sentido discriminada por ser mujer. La tecnología es un mundo dominado por hombres, pero creo que el éxito depende de la actitud y de la mentalidad positiva.

¿La tecnología puede cambiar al país?

Nuestra carta de expansión es la tecnología, ya que podemos trabajar para cualquier país. El internet y los dispositivos inteligentes nos permiten adquirir conocimientos y generar negocios. La tecnología es equivalente a progreso.