Fajardo Hill, curadora general de la 19 Bienal de Arte Paiz (BAP 19), explicó que la palabra Transvisible, se escogió por la naturaleza de las obras que se presentan que aluden a procesos en permanente transición y los han dividido en cuatro temas: sanación y rituales, especifidad y cuerpo, territorio y sexualidad y masculinidad. 

Dijo Paiz Serra que “en 1976, el artista visual Zipacná de León, en ese entonces maestro de pintura de sus sobrinos, le transmitió la necesidad de apoyar los movimiento artísticos que se daban en Guatemala y que tenían poca ayuda institucional. De esa conversación surgió la Fundación Paiz y más adelante la Bienal de Arte Paiz”. 

Han pasado 38 años de que se celebró la primera bienal y con el paso del tiempo este evento ha evolucionado y desarrollado modelos más contemporáneos para mantenerse vigente. Al principio la Bienal premiaba a los artistas más destacados en las distintas disciplinas participantes. Hoy, ha dejado de ser una competencia para transformarse en una plataforma de intercambio entre artistas nacionales e internacionales en la cual se promueven ideas para cuestinarlas.

 La presidenta de la BAP 19, agradeció el apoyo del comité curatorial integrado por: Anabella Acevedo, Rosina Cazali, Pablo Ramírez y Cecilia Fajardo Hill, así como a los directivos de centros culturales en los que se exhiben las piezas y a varias embajadores que apoyan a artistas originarios de sus respectivos paises que visitan el país invitados por la bienal. 

 La exhibición de obras artística se complementará con actividades de aprendizaje con expertos en diferentes disciplinas culturales, lecturas de poesía, espectáculos musicales y talleres que impartirán expertos invitados.

Las actividades son gratuitas y abiertas a todo público y se desarrollarán en los centros culturales de la zona 1 de la capital: ArteCentro Graciela Andrade de Paiz, Centro Municipal de Arte y Cultura, Centro Cultural de España en Guatemala y el Cine Lux.

En la noche inaugural entre un ambiente iluminado con luces de colores y trabajos de restauración que se hacen al edificio en el que durante algunos años funcionó un hotel, los asistentes degustaron un coctel y observaron la presentación de Balam Ajpú, grupo musical de Hip-Hop integrado por jóvenes de la etnia Tz’utujil.