Guatemala

Testigo implica a Otto Pérez Molina en juicio por genocidio

El testimonio por videoconferencia de Hugo Ramiro Leonardo Reyes, quien se desempeñó como mecánico especialista militar de la tropa kaibil que operó en el área ixil, mencionó ayer al presidente Otto Pérez Molina, en el juicio que se sigue contra el general José Efraín Ríos Montt, por genocidio.

El testigo por videoconferencia —al fondo—, durante su relato en el juicio por genocidio mencionó al presidente Otto Pérez Molina.

El testigo por videoconferencia —al fondo—, durante su relato en el juicio por genocidio mencionó al presidente Otto Pérez Molina.

CIUDAD DE GUATEMALA – 

“Los militares y los soldados a las órdenes del mayor Tito Arias, conocido como Otto Pérez Molina; el general —José Luis— Quilo Ayuso y (…) los comandantes de las compañías de ingenieros coordinaban la quema y saqueo de la gente para luego ejecutarlos”, fue lo declarado por Leonardo Reyes.

Con estas declaraciones el kaibil implicó al mandatario. Sin embargo, el Gobierno calificó de una irresponsabilidad del Ministerio Público (MP) haber admitido que el testigo incriminara al mandatario.

El testigo expresó: “Las personas que llegaron a ser ejecutadas en el campamento llegaban golpeadas, torturadas, con la lengua quitada, con las uñas quitadas, entre otras lesiones”.

Leonardo Reyes explicó al Tribunal que en Santa María Nebaj funcionó la Primera Compañía de Batallón de Ingenieros, a la cual perteneció.

También dijo que todos los oficiales que estuvieron en el lugar “participaron de los crímenes en contra de la población. Todos ellos fueron partícipes de las ejecuciones que se hicieron en un lugar que se llama El Pino. Todos adentro de la Compañía nos dimos cuenta de lo que hacían”, expuso.

Según Leonardo Reyes, cuando en El Pino, ubicado en Nebaj, Quiché, ya no hubo lugar para enterrar los cadáveres de las víctimas, los soldados utilizaron un terreno en una aldea conocida como El Roble.

“Allí escondieron a las víctimas que llevaron y ejecutaron en el campamento”, refirió.

Traslados

El testigo indicó a los jueces que al campamento instalado por los militares en Santa María Nebaj eran trasladados los pobladores de San Juan Cotzal y San Gaspar Chajul, entre otros lugares.

“Había camiones que traían gente de varias partes. No eran exclusivamente de Santa María Nebaj”, aseguró.

En ese momento el sistema de grabación de audiencias tuvo fallas y la presidenta del Tribunal Jazmín Barrios ordenó que se repitieran las declaraciones.

“Quemaron casas”

De las declaraciones del testigo protegido del MP se desprende el señalamiento de tratos crueles de soldados hacia los pobladores de Sajbal, Quiché.

“Esas personas fueron capturadas, no en la montaña, porque no pertenecían a ese lugar, sino en sus casas. Las quemaron a órdenes del mayor Tito Arias”, aseguró.

También expresó que hubo un grupo de capturados que fueron trasladados al destacamento de Santa María Nebaj.

Décima jornada

Pese al amparo provisional de la Corte de Constitucionalidad de la recepción de pruebas ofrecidas por la defensa de Ríos Montt, ayer siguió el debate en que también se juzga al general José Rodríguez Sánchez.

Este proceso, en su décimo día, se inició con la declaración de tres peritos de la Fundación de Antropología Forense de Guatemala, quienes dieron a conocer sus peritajes en la evaluación e identificación de cinco osamentas.

Según los expertos, estas correspondían a cinco víctimas de la aldea Uxilac Grande, Nejab, Quiché. Una de las osamentas era de una mujer embarazada, indican los peritajes.

Salvado por militar

Además declaró Julio Velasco Raymundo, quien relató que tenía 8 años de edad cuando lo sacaron de su aldea, en Santa María Nebaj, y lo trasladaron a un campamento de la localidad. Junto a él había otros tres menores, a quienes identificó como Domingo, Tomás y Alejandro. Los últimos dos murieron a manos de oficiales del Ejército, expuso.

“Vi cuando mataron a una anciana. Los oficiales le cortaban la cabeza. Ellos entraron en la cocina y jugaban con la cabeza de la anciana como que fuera pelota”, aseguró.

Refirió que durante el tiempo que estuvo allí vio llegar a entre cinco mil y seis mil personas, a quienes torturaban y mataban. Indicó que los cuerpos los enterraban en fosas hechas con excavadoras. Pasado el tiempo los sacaban y pasaban a otra fosa, donde los quemaban.

Velasco relató que logró huir del campamento y cuando lo iban persiguiendo, un especialista fue quien lo salvó, lo llevó con la familia del militar y luego lo regresó a la aldea de donde había salido.

Pedro Herrera Bernal, otro testigo y quien comandó una patrulla civil y relató los castigos que recibían en estas, así como la obligación que imponía el Ejército para formar estos grupos.

Posturas

El fiscal Orlando López dijo que confía plenamente del testimonio de Leonardo Reyes.

Sin embargo, al consultar con autoridades del Ministerio de la Defensa sobre el historial de Leonardo Reyes se indicó: “El nombre fue ingresado al sistema de búsqueda como “Hugo Ramiro Leonardo Reyes”, “Hugo Ramiro Reyes”, “Hugo Leonardo Reyes” y “Hugo Ramírez Reyes”, pero no apareció.

“Error garrafal del MP”

En defensa del presidente Otto Pérez Molina, su secretario general, Gustavo Martínez, señaló anoche  al Ministerio Público (MP) de cometer un “error garrafal”.

“Me tiene sumamente sorprendido el error garrafal, inaudito de pleno derecho, cometido por el MP, en el cual se está siguiendo un juicio contra dos exmilitares y permite que una persona declare contra un tercero que no ha sido citado, escuchado y vencido en juicio”, dijo Martínez.

Afirmó que el mandatario no se pronunciará porque aún no conocen a profundidad el asunto y el contexto de la declaración.

Al ser cuestionado sobre si Pérez Molina estuvo presente en Nebaj, Quiché, durante el enfrentamiento armado, el funcionario dijo: “Oficialmente no tengo ningún dato, porque no tengo acceso a esos archivos, pero sí sé que él estuvo en Nebaj”.

 “Quisiera pedirles a las autoridades pertinentes que si existen responsables, que se les abra juicio por haber vulnerado los derechos de una persona que no tiene juicio”, refirió Martínez.

“El racismo es la antesala del genocidio”

“Para referirse a los ixiles utilizaban términos despectivos. El racismo que se tenía hacia las comunidades y los pobladores es la antesala del genocidio”, fueron las declaraciones que Marta Eugenia Casaús Arzú emitió ayer en el Tribunal Primero A de Alto Impacto.

Casaús cooperó con el Ministerio Público (MP) en la elaboración de un peritaje referente a la máxima expresión del racismo durante el conflicto armado interno que se vivió en Guatemala desde 1960 a 1996.

La perito explicó que en los informes que las bases militares enviaban al alto mando se encuentran expresiones como “chocolates”, “indios”, “sucios” y “negros”. También utilizaban palabras soeces.

 Entre las conclusiones que Casaús emitió en su estudio resalta que “no era cuestión de aislar a los ixiles, porque se encontraban en un lugar con acceso limitado, sino que se intentó reubicarlos. Por eso se implementaron aldeas modelo en las cuales debían realizar las tareas que se les imponían”, dijo.

Según la experta, uno de los objetivos de la campaña contrasubversiva implementada hacia los indígenas “era lograr cambiar la concepción que ellos tenían de la realidad, que perdieran sus costumbres y tradiciones. Querían modernizarlos”, refirió.

“Enemigos internos”

Casaus dijo a los jueces que la imagen que las fuerzas armadas tenían sobre los ixiles era de “enemigos internos”, debido a que, según los soldados, mostraban una actitud favorable a las acciones de la guerrilla.

  “Una de las órdenes era acabar con los enemigos”, señaló la perito durante el debate.

Mujer  embarazada

Marco David García King, experto en microbiología y genética,  fue el primer perito en declarar.

En su  testimonio explicó que entre las osamentas que fueron evaluadas en la Fundación de Antropología Forense de Guatemala, para la cual él labora, fue localizada una osamenta que llevaba en la región pélvica  otro cadáver, “lo que significa que la mujer estaba embarazada”, dijo.

Cinco víctimas

Mishel Marie Stephenson Ojea, jefa de la unidad de genética de la Fundación de Antropología Forense de Guatemala, también se refirió a las evaluaciones que hicieron a las cinco osamentas identificadas en la aldea Uxilac, Nebaj.

Afirmó que  para la identificación de las víctimas escucharon testimonios y  verificaron la vestimenta que llevaban, entre otros factores que tomaron en cuenta.

Causa de muerte

Alma Nydia Vásquez Almazán fue escuchada como experta de la Fundación de Antropología Forense de Guatemala propuesta por los querellantes adhesivos del proceso.

Vásquez Almazán expuso sobre las seis osamentas evaluadas por los forenses entre el 2007 y el 2010.

Su declaración en el juicio se basó en  la causa de muerte de las  víctimas identificadas y si fueron golpeadas antes de morir.